Homenaje a los tres artificieros fallecidos en un accidente en 2013

La familia legionaria no olvida a sus caídos y, como cada año, se reúne ante en el monolito erigido por la Bandera de Zapadores en la base militar Álvarez de Sotomayor de Viator para recordar a los artificieros Manuel Velasco Román, Antonio Navarro García y José Francisco Prieto González.

Los tres especialistas en desactivación de explosivos perdieron la vida en la detonación accidental de un proyectil de mortero en mayo de 2013. El siniestro se produjo dentro de la base, cuando regresaban del campo de maniobras.

La suceso es la mayor tragedia que se recuerda en el campamento desde la llegada de la Legión a la provincia de Almería hace casi 25 años y todavía conmueve a sus compañeros.

En señal de respeto, los zapadores formaron frente al monumento, en una zona de pabellones junto al patio de armas del cuartel. En esta ocasión faltó el general Marcos Llago Navarro, jefe de la Brigada de la Legión, que se encuentra liderando la misión de las Naciones Unidas en Líbano hasta el próximo mes de julio.

La situación extraordinaria provocada por la crisis del coronavirus no ha impedido que los legionarios cumplan con su homenaje a los caídos, a solo unos pasos del lugar donde se celebró el funeral por los artificieros hace siete años, en un acto sin precedentes en Viator.

Pedro Morenés, entonces ministro de Defensa, presidió los funerales en la base Álvarez de Sotomayor, en una cita multitudinaria con presencia de numerosas autoridades civiles y militares de la provincia. Desde entonces, se desarrollaron diversos homenajes.

La Brigada de la Legión terminó por colocar un monolito con una placa en honor a sus compañeros. Cada año se reúnen ante esta memorial para honrar el recuerdo imborrable de los caídos en acto de servicio.  El Ministerio de Defensa rindió homenaje a los soldados caídos en acto de servicio con un ascenso simbólico en el escalafón militar en  2018.