Consumo advierte que aplicar una tasa por el Covid-19 sería ilegal

Tras hacerse popular la llamada Tasa Covid y suscitar numerosos debates, la Dirección General de Consumo ha sido tajante al advertir que añadir a la factura el coste de la desinfección es sencillamente ilegal. Así que los bares, cafeterías, restaurantes y otros negocios que lo habían empezado a hacer tendrán que retirarla si no quieren afrontar sanciones.

Consumo, a través de una nota informativa, señala que las medidas de higiene, desinfección, prevención o acondicionamiento “no son de cumplimiento potestativo por su parte, sino que les resultan de obligado cumplimiento de acuerdo con la normativa vigente”. Puntualiza además que no son servicios accesorios opcionales sobre los que el consumidor tenga capacidad de aceptación o rechazo, sino que son inherentes a la propia actividad comercial de los establecimientos y locales con apertura al público en general.

Discrepancias

La cuestión es que algunos bufetes de abogados, como es el caso de Legalitas, hacen otro tipo de interpretación de la ley y sus normativas. Este colectivo profesional entiende que sí es legal que un negocio cobre un extra por este motivo; no obstante, debe ser avisado de antemano y señalizado correctamente por parte de los establecimientos.

Al igual que ocurre con los suplementos por “comer o beber en mesa o terraza” de un restaurante, estos importes se deben especificar, indicando expresamente la cantidad, y aplicarse o no en todas las circunstancias por igual. Recuerda que el precio de venta al público es libre, por lo que el establecimiento tendrá derecho a cobrar lo que considere.

"Tasa, no"

Esta cuestión afecta por igual a los diferentes tipos de establecimiento del sector de la hostelería, y a otros como peluquerías, terrazas, clínicas dentales o tiendas de ropa, incluso a los centros escolares privados o concertados, ya que algunos de ellos contemplan la posibilidad de aumentar sus tarifas para compensar el sobrecoste de las medidas de prevención y seguridad ante el virus.

La otra vía para tratar de recuperar esos costes extra en los que ahora deben incurrir casi todos los establecimientos pasaría por eludir el uso de la palabra “tasa”, incluso evitar suplementos que aparezcan como tales en facturas, y simplemente elevar en un porcentaje razonable los precios de los productos y de los servicios. Los empresarios entienden que esa opción es la menos arriesgada, pero con una impopularidad notable entre los clientes habituales de sus negocios.