Choque entre el comité vecinal y el Ayuntamiento

El  comité vecinal de Almería ha enviado un escrito mostrando su disconformidad con la gestión del Ayuntamiento de la capital considerando que “desprecia a los interlocutores sociales” y pone como uno de los ejemplos de la situación los diez días que desde el área de Participación Ciudadana, según el comité, “para desalojar su sede, como si fueran okupas después de 40 años, ya que es titular de propiedad el Ayuntamiento” y afirma que será el propio Consistorio el que gestionará el centro y se preguntan los miembros del comité “con qué medios y personal y donde llevaran los inmuebles y material propiedad de los vecinos para impedir que continúen haciendo su labor vecinal”.

Desde el Ayuntamiento, la propia edil de Participación, Paola Laynez, asegura que “en ningún momento se les ha pedido que abandonen el centro vecinal a ninguna de las asociaciones que hay allí” lo que sí explicó es que “la decisión que se ha tomado es realizar un cambio en el modelo de gestión de forma que se va a llevar de forma directa”.

Talleres
La explicación que da la edil es que se quiere “completar la oferta que se da en el centro vecinal con la realización de otro tipo de talleres” pero ratifica que “no se pretende ni echar a ninguna asociación ni meter en ella ninguna otra”.

Además, asegura que se va a hacer una “puesta al día del edificio”. A esto suma que no será el único centro que pueda pasar por este cambio, ya que se está estudiando la gestión en varios barrios.

Interlocución
Más allá de la situación singular de este cambio, desde el comité vecinal expresan un malestar importante al sentir que desde “la Alcaldía se está produciendo un ataque a la dignidad del movimiento vecinal, y un desprecio a la participación ciudadana, además de no consultar con este comité las causas de haber llegado a esta situación, ignorando su papel de interlocución tal como reconoce el Decreto de nuestra creación en 2009, además, ésta medida arbitraria, no nos parece coherente, ya que desde el inicio de la democracia siempre se han gestionado los centros las asociaciones de vecinos por éstos y se ha de respetar la libertad de funcionamiento”.

Insisten, además, en lo que consideran como decisiones “arbitrarias” y “totalitarismo con el que la Corporación municipal actúa y toma decisiones que nos afectan a todos los almerienses, sin contar ni pedir opinión a los vecinos”.