“La Semana Santa que hoy tenemos es gracias a las bases sentadas esa época”

José Luis Cantón, prestigioso cofrade, es el presidente de la Gestora de la Hermandad Patronal

José Luis Cantón ante la Catedral de la Encarnación, sede de su Cofradía de Estudiantes.
José Luis Cantón ante la Catedral de la Encarnación, sede de su Cofradía de Estudiantes. JA Barrios
Juan Antonio Barrios
07:00 • 08 ago. 2020

José Luis Cantón es uno de los cofrades de mayor prestigio de las  Hermandades de Almería. Fue hermano mayor en distintas etapas de la Hermandad de Estudiantes, presidente de la Agrupación de Cofradías y de distintas gestoras. En la actualidad es el presidente de la Gestora de la Hermandad Patronal. A él se le debe buena parte del resurgir cofrade y su actual dinamismo.



¿Cuándo estás integrado en las Cofradías?



Desde pequeño. La primera vez que me vestí con túnica nazarena fue con cinco años en la Borriquita y en mi Cofradía de Estudiantes, prácticamente al mismo tiempo.



¿Cuentas con una dilatada trayectoria cofrade y de responsabilidad?



El Señor me ha querido poner en estas situaciones y tesituras. Los que me conocéis sabéis que estoy al servicio de las hermandades y de la iglesia. Donde se me ha necesitado he estado.






Has formado parte destacada del resurgir cofrade en Almería a final de la década de los años 70



Tuve la suerte de estar en la Junta de Gobierno de José López-Gay. Con tan solo 15 ó 16 años era ya teniente hermano mayor , siempre al amparo de Don Juan López Martín. Fue quien dio el impulso cofrade en esos duros años. 


¿Fuiste hermano mayor de  Estudiantes?

El mes de abril de 1979 me propusieron ser hermano mayor. Fue cuando iniciamos el resurgir de la Semana Santa de Almería.


¿Cómo recuerdas aquellos duros años?

Recuerdo, esencialmnte, a la gente de aquella época y la ilusión que poníamos por recuperar nuestra Semana Santa. En aquellos años eran pocas las hermandades que salíamos a la calle. Aunque la mayoría de la gente estaba muy pegada a Estudiantes, de ahí se fue desgajando grupos de jóvenes e incorporándose a las hermandades que habían en sus parroquias para recuperarlas. A Miguel Aparicio se le ha reconocido muy poco. Fue un hombre que hizo mucho por la Semana Santa de Almería y Ventura, ambos de la Cofradía del Silencio. Junto a ellos destacar a Luis Orts, José Luis López Gay, mi tío Pedro Pavón, José Martín Visiedo o Carlos Galice, entre otros mucho que como tú, formaste parte de ese gran grupo.


Pedro Pavón  luchó incansablemente y no sólo por Estudiantes

Mi tío Pedro es a otro de los que algún día se le hará justicia en esta Semana Santa. Él es el responsable de que hoy tengamos orfebrería, tal y como la conocemos se le debe a Pedro Pavón. Por circunstancia de la vida, Pedro se tiene que trasladar a Sevilla y como había sido hermano mayor de la Hermandad de Estudiantes, allí contacta con gente muy relacionada con su devoción. Se vincula a las Hermandades de la Esperanza de Triana y del Cachorro, porque compañeros suyos en los centros sanitarios, donde él trabajaba, eran sus hermanos mayores.  Comienza a tener un conocimiento cofrade que en Almería no existía.  


¿Estábamos lejos de los grandes artesanos?

Efectivamente. Él va conociendo a los orfebres, imagineros, bordadores y poco a poco la Hermandad de Estudiantes va renovando su patrimonio. En el año 1981 estrenamos los candelabros de cola, varales y el moldurón del paso de palio de la Esperanza. Ese fue el inicio de la llegada de la orfebrería en Almería.




¿La actual Semana Santa de Almería le debe mucho a esa época?

La Semana Santa que hoy tenemos es gracias a las bases que se sentaron en esa época y que fueron buenas. A pesar de que había mucha reticencia por parte de la iglesia, las hermandades fuimos conscientes de ella y colaboramos en todos los sentidos con parroquias, santuarios y eso fue dando sus frutos. 


¿El papel del obispo?

Recuerdo cuando Don Manuel Casares (QPD) llega a Almería y no quería cofradías porque además, llegó en el declive total de la Semana Santa. Se fue poco a poco ganando. En los últimos años de Monseñor Casares fui presidente de la Agrupación de Cofradías, tuve la oportunidad de tratarlo mucho y compartir muchas cosas con él. Don Manuel cambió mucho en la manera de pensar. 


¿Las cofradías son destacadas en la iglesia?

Estoy completamente convencido. La prueba es que las hermandades somos una institución grande y muy importante, como seglares, dentro de la iglesia. Ahora mismo, dentro de las instituciones de la iglesia, somos los que más hermanos tenemos. Nuestro obispo, Don Adolfo González Montes, apoya muchísimo a las hermandades y requiere que nos formemos y que sigamos trabajando en esta linea. 


Has sido presidente de distintas gestoras

Cuando llegas, porque te han impuesto, eso crea mucha fricción con la gente. Te ven como la persona que viene a fiscalizar y la realidad es que en ningún momento he llegado así. Estuve en las Hermandades de la Borriquita, la Virgen del Carmen de Pescadería y en la actualidad soy el presidente de la Gestora de la Hermandad de la Patrona.


¿Cómo llevas la Gestora de la Patrona?

Yo llego a ordenar y a cumplir el mandado del Señor Obispo. La Gestora de la Patrona  está suponiendo para mí un esfuerzo tremendo. La gente no lo ha aceptado bien pero hay que tomar decisiones y regularizar situaciones y dejarlo todo al día. El Código del Derecho Canónico está ahí, las normas de la Conferencia Episcopal hay que cumplirlas y nuestras Normas Diocesanas para Hermandades y Cofradías, dictadas por el Obispo, igualmente. Nos gusten o no, las Normas están para cumplirlas.


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