La polémica abierta en 2019 por la recuperación, por parte de la Junta, de la gestión directa de cinco escuelas infantiles andaluzas tras años gestionadas por concesionarias privadas no ha acabado con la decisión -obligada por la Justicia- del Gobierno regional de readmitir a las 73 trabajadoras que fueron ‘despedidas’ el año pasado, puesto que ahora son las profesionales que ocuparon sus puestos las que protestan y piden no ser destituidas para que sus ‘compañeras’ vuelvan a sus puestos.
Entre las que ahora piden seguir en sus puestos de trabajo se encuentran las trabajadoras de la Escuela Infantil Mediterráneo de Almería, que fueron designadas a través de las bolsas de empleo de la Junta y que han convocado una concentración el próximo miércoles, 21 de octubre, a partir de las 17,30 horas a las puertas del centro para protestar por su situación de incertidumbre.
“Llevamos toda la vida luchando por una vacante, por un puesto de trabajo digno, a través de la bolsa de empleo, y cuando tenemos algo en condiciones vemos que podemos perderlo. Creemos que no es justo”, explica una representante de las profesionales almerienses, entre las que se encuentran la directora, una cocinera, limpiadoras, maestras y técnicas.
El resto de trabajadoras andaluzas afectadas también han convocado concentraciones en sus respectivos centros.
Readmisión obligada La Junta de Andalucía se ha visto obligada a readmitir a las 73 trabajadoras inicialmente despedidas -entre ellas 14 de Almería- después de que los tribunales hayan ido dando la razón, una a una, a las demandas presentadas para pedir la readmisión, al entender que tanto el convenio colectivo como la jurisprudencia las amparaban. De ahí a que la Comisión de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía aprobara en julio de este año la presentación de una Proposición no de Ley para readmitir no solo a las trabajadoras con sentencia, sino también a las que aún están pendientes de juicio, como sucede con las almerienses.
Esta Proposición dice textualmente: “El Parlamento de Andalucía insta al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía a no recurrir las sentencias dictadas por los juzgados de lo social a favor de las trabajadoras de las cinco escuelas infantiles despedidas y en las que se condena a la Consejería de Educación y Deporte, y que, de manera indivisible, se proceda a la readmisión de las mismas en sus puestos de trabajo”.
Aunque todavía está pendiente la aprobación en el pleno del Parlamento andaluz, las actuales profesionales de los centros temen perder sus puestos. Según una de sus representantes en Almería, lo justo sería que las actuales trabajadoras siguieran en sus plazas y que las readmitidas pasaran ahora ocupar “los últimos puestos de las bolsas de empleo”.
En cambio, las previsiblemente readmitidas piden que todas las trabajadoras afectadas, unas y otras, conserven un puesto de trabajo. “Creemos que ninguna debe quedar en la calle ahora por un error político, de hecho exigimos en las reuniones con los partidos que así fuera y nos prometieron que se crearían las plazas suficientes para conseguirlo”, dice Encarnación López, quien fuera directora de la Escuela Mediterráneo hasta el año pasado.
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