La lucha contra el tráfico de marihuana se ha convertido, al mismo tiempo, en una batalla contra la defraudación del fluido eléctrico. Las fuerzas de seguridad han detectado bloques de viviendas ocupadas por plantaciones de marihuana en la provincia de Almería capaces de consumir la misma energía que todo un polígono industrial, una muestra del elevado consumo de los cultivos.
En esta misión, la Comisaría Provincial de la Policía Nacional mantiene activo un plan de colaboración con la compañía Endesa para detectar enganches ilegales, perseguir el delito de defraudación y facilitar la retirada de los equipos conectados ilegalmente a la red.
Durante este año, técnicos y policías han cooperado para cortar casi 1.400 enganches irregulares en inspecciones realizadas fundamentalmente en la capital almeriense y El Ejido. Son solo los datos de la Policía Nacional en su demarcación, pero evidencia la alta penetración de este tipo delictivo en los barrios donde las plantaciones de marihuana se han multiplicado.
Los agentes han realizado este año unas 2.000 inspecciones, siempre con apoyo de los técnicos de Endesa (el 75 por ciento llevadas a cabo en la capital). No son solo trabajos vinculados a la lucha contra la marihuana, principal reto actual en este campo, sino que a veces se trata de dispositivos de seguridad donde los agentes acompañan a los electricistas para dotarles de seguridad durante los trabajos de desconexión.
Endesa ha alertado en varias ocasiones sobre la incidencia de este fenómeno. Durante este ejercicio, la compañía ha realizado inversiones para mejorar la red en barrios capitalinos como El Quemadero, Piedras Redondas, La Chanca o El Puche.
Delito de defraudación
El principal objetivo ha sido mejorar las redes de baja y media tensión de “estas zonas afectadas por numerosas incidencias en el suministro eléctrico debidas a los enganches ilegales, que saturan las redes de distribución provocando un gran prejuicio a todos los clientes, sobre todo en este periodo de confinamiento”, según informó Endesa.
En la actualidad, prácticamente todas las operaciones contra el cultivo de marihuana en la provincia de Almería están acompañadas de técnicas de Endesa (ya sea como parte del dispositivo inicial cuando son actuaciones planificadas, ya sea a posteriori cuando se producen hallazgos casuales).
Los electricistas ayudan a identificar los enganches, a cortarlos para ganar en la seguridad de la zona y a consolidar las futuras acusaciones de un delito de defraudación donde Endesa suele presentarse como acusación (o bien la Fiscalía reclama responsabilidades civiles por la cuantía del dinero defraudado).
El año pasado las fuerzas de seguridad localizaron más de 101.000 plantas de marihuana en operaciones desarrolladas en la provincia de Almería. El número de detenidos superó a los registrados en actuaciones contra el hachís.
Por otra parte, a los enganches ilegales a la red eléctrica se han añadido cada vez más las conexiones irregulares al agua. Por eso, la Policía Nacional colabora también con Aqualia para cuantificar el desvío y añadir acusaciones contra los cultivadores. Almería está entre las provincias españolas con mayor incidencia de la marihuana en España, especialmente se se mira su escasa población en comparación a otros territorios del país.
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