El Gobierno retoma el plan de uso de renovables en las desaladoras

El programa elaborado por el Ministerio para la Transición Ecológica y destinado a impulsar la utilización de energías renovables para actividades de alto consumo energético volverá a retomarse de cara a los próximos años y permitirá abordar las inversiones que se habían previsto para su puesta en marcha definitiva.

El plan ya fue diseñado hace dos años, pero la inestabilidad política vivida, con la repetición de las elecciones generales de por medio, impidió su inmediata puesta en marcha. El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, lo consideró entonces como un ‘compás de espera’ hasta que se pudiera volver a activar.

Plan de actuación

Superada aquella crisis política y con los problemas derivados del cambio climática urgiendo a la adopción de decisiones, fuentes del Ministerio han confirmado a La Voz de Almería que ese plan de actuaciones vuelve a retomarse porque se considera urgente avanzar hacia un modelo menos contaminante en el uso de recursos energéticos.

Un plan que se centra en el uso de energías alternativas en algunos de los sectores de mayores consumos, como es el caso de las plantas desaladoras que se han estado construyendo en varias zonas del país y que presentan unos niveles de consumo de electricidad muy importantes.

Los proyectos

Uno de los puntos en los que el Ministerio planea desarrollar sus primeras inversiones es la provincia de Almería, donde hay hasta el momento seis plantas desaladoras de agua del mar, y además varios planes de construcción de otras nuevas o de ampliación de las existentes, casos de las desaladoras de Carboneras o de Balerma.

Los problemas derivados de las frecuentes ‘desconexiones’ de los trasvases del Negratín o del Tajo-Segura, como consecuencia de la escasez de precipitaciones que se han registrado en los últimos año, aconsejan apostar de forma decidida por la desalación, al tratarse de una manera de obtener recursos hídricos que no depende de la pluviometría y que permita ofrecer garantías de abastecimiento a los regadíos de la provincia.

Los costes

La aplicación de energía solar o eólica para atender las necesidades de cada una de esas plantas supone no sólo un ahorro de energías convencionales, alimentadas por combustibles fósiles, sino otro de corte económico ya que al disponer de una instalación de producción junto a la planta el coste de la electricidad sería sensiblemente menor.

Se trata de una demanda que han realizado en varias ocasiones desde la Federación de Regantes de Almería, Feral, que señala que abastecer con renovables las desaladoras supondría un más que notable ahorro ya que actualmente el coste de la electricidad necesaria para producir el agua desalada supone más de la mitad del precio de cada metro cúbico de agua.

Varias zonas del país entran en esos planes del Ministerio para la Transición Ecológica, las que tienen una mayor dependencia de este tipo de recursos y que, en la mayoría de los casos ya disponen de instalaciones para la desalación de aguas marinas o salobres. Junto a Almería forman parte de esa primera batería de actuaciones plantas y proyectos de la vecina Murcia o de las Islas Canarias.