Desde este miércoles y durante 14 días, la capital tiene cerrada la actividad no esencial en un intento de aplanar la curva epidemiológica de la pandemia del coronavirus y frenar el brutal ascenso de contagios de estos últimos días.
Los comercios del Paseo de Almería, como los del resto de la ciudad, han bajado la persiana, pero hay uno que no volverá a subirla.
Esta semana veíamos cómo se desmontaba tanto el letrero de esta céntrica y conocida tienda como su interior. Se trata PULL&BEAR, que abría por última vez al público el pasado 23 de enero.
Perteneciente al Grupo Inditex (Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home y Uterqüe), Pull&Bear está presente en 76 mercados con una red de más de 970 tiendas y la tienda online.
En la provincia de Almería su presencia se ha quedado reducida a las tiendas ubicadas en el Centro Comercial Torrecárdenas, de la capital, y en el Gran Plaza, en el municipio de Roquetas de Mar.
Un cierre que deja una imagen más desoladora del centro de la ciudad y de su vía más comercial, por lo menos años atrás. Sus comerciantes llevan años pidiendo medidas eficaces para 'salvar' sus negocios.
En los últimos años, los cierres y traspasos de negocios en esta parte de la ciudad han sido más que frecuentes. Precisamente, del Paseo de Almería han desaparecido en los últimos meses importantes firmas internacionales y con gran éxito entre los consumidores, tales como el todopoderoso Zara, aunque también es cierto que se han producido algunas aperturas.
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