Marta Bosquet: “Los que se quieran ir tras Hervías tienen las puertas abiertas”

En medio del terremoto político que sacude a Ciudadanos después de la moción de censura frustrada en Murcia y el adelanto electoral en Madrid que se ha saldado con la salida de varios dirigentes, la presidenta del Parlamento andaluz y miembro del Comité Ejecutivo naranja, Marta Bosquet, habla claro del futuro de la formación naranja. También de sus aciertos y de sus errores.

-¿Cómo está viviendo este terremoto político que sacude a su partido? 

-Yo estoy tranquila porque  afortunadamente en Andalucía hay estabilidad. Pero también estoy preocupada por otras cuestiones que están sucediendo en Ciudadanos a lo largo de nuestra geografía. Esa ida de algunos compañeros y lo que peor llevo, que se vayan y no dejen su acta, me parece que es defraudar a los votantes de Cs, a los que un día confiaron en ti.

-¿Esto se desencadena por la moción de censura en Murcia o cree que se ha preparado desde hace tiempo?

-Sinceramente, ahora te preguntas si eso no se había gestado anteriormente por el que fue secretario de organización para cargarse el partido desde dentro, y desde cuánto tiempo atrás tienes que remontarte para entender lo que está pasando.

Lo que no está justificado en modo alguno por lo ocurrido en Murcia es el  adelanto de elecciones  por la señora Ayuso. Es una irresponsabilidad por su parte porque en Madrid no se iba a llevar a cabo ninguna moción de censura y ha sido ella la que ha querido un adelanto electoral irresponsable teniendo en cuenta que el Estatuto de Autonomía de Madrid obliga a que dentro de dos años vuelva, a otra vez, a haber elecciones. A mí me gustaría saber qué es lo que ha motivado a la señora Ayuso a la convocatoria más allá de sus propios intereses personales. 

Del resto de temas, es verdad que llegados a este punto te cuestionas muchas cosas que están sucediendo ahora y que a lo mejor también han sucedido en el pasado. Te planteas hasta que punto el que había sido secretario de organización del partido había extendido su red para cargarse Ciudadanos desde dentro. 

-¿Hasta qué punto esta situación une o desune? El lunes hubo cambios en el equipo de Inés Arrimadas y ascendió a Juan Marín con el que no parecía haber mucho ‘feeling’.

-Inés Arrimadas tiene en su ejecutiva nacional a Juan Marín, Javier Imbroda, Guillermo Díaz y a mí, y si estamos es por decisión de ella. En absoluto ha habido una falta de confianza entre Marín y ella. Él siempre ha estado con Inés al cien por cien. Juan es una persona leal a Cs y leal a Inés Arrimadas. Cualquier otra especulación es falsa.

-¿Confía en que Cs Andalucía se mantenga unido? Voces críticas las hay e incluso se hablaba de una moción de censura. 

-Estoy también segura de  que mis compañeros de Ciudadanos Andalucía, de  todos los que formamos el Grupo Parlamentario, queremos agotar la legislatura. Nosotros cuando nos presentamos a elecciones teníamos claro que queríamos un cambio político que afortunadamente está sucediendo y es verdad que las cosas están yendo bien. 

Tenemos tres presupuestos aprobados, cerramos con superávit, cumpliendo las reglas fiscales de gasto, deuda y déficit, es decir, que hay estabilidad dentro de la precaria situación provocada por la COVID. Por eso confío plenamente en que lo que se ha dicho de una posible moción de censura por parte de algunos compañeros de Ciudadanos Andalucía es totalmente falso. 

Lo que quieren ahora los ciudadanos andaluces es estabilidad. No quieren estar pensando en elecciones por intereses partidistas de algunos que, desde luego, no piensan en los intereses del ciudadano. 

-PP y Cs han cerrado un pacto para no hacer ‘fichajes’ de cargos en Andalucía pero ¿temen que Génova no lo respete? 

-Lo que me muestra este compromiso que presentaron Elías Bendodo y Juan Marín es la pretensión de convertir Andalucía en una especie de isla con respecto a lo que se esté produciendo en otros territorios. Queremos salvar la estabilidad que hay en Andalucía y queremos salvarla por el bienestar de los andaluces. 

Si otros están pensando, ya sea de Ciudadanos, del Partido Popular, del PSOE o de cualquier partido político, en hacer un cambalache o un intercambio de cargos aquí en Andalucía, lo que tenemos claro las dos fuerzas políticas ahora mismo sustentan al Gobierno andaluz es que para eso no cuenten con nosotros.

-¿Convencida de que no puede llegar vía Madrid?

-Pondría la mano en el fuego y probablemente no me la quemaría. En caso contrario, desde luego que me defraudaría muchísimo. Es que afortunadamente las cosas en Andalucía se están haciendo bien. Entonces, si alguno de mis compañeros no pensara eso y pensaran más que en otro tipo de intereses, me decepcionaría muchísimo.

-¿Temen una huida de afiliados con el ruido interno siguiendo la estela del que fue secretario de Organización, Fran Hervías?

-Si algunos afiliados se va porque estaban en la corriente de Hervías, bienvenida sea su marcha. Lo tengo clarísimo. Porque entonces se demuestra que esos afiliados no eran de Ciudadanos, estaban en algunos casos seguramente  por intereses particulares y no porque realmente querían este proyecto. Con lo cual, los que se quieran ir con Fran Hervías las puertas están abiertas.

-¿Temen que ante esta situación de debilidad de la formación la gente se incline por el voto útil?

-Es que el voto útil es para Ciudadanos porque está demostrando esa utilidad de trabajar a un lado y a otro del espectro político. Además, viene a moderar determinadas políticas, ya sean de un lado o de otro, y a aportar también regeneración democrática. Nosotros no vamos comprando voluntades por ahí. Prueba de ello es esa moción de censura que se hizo en Murcia. De los 500 cargos públicos que se han puesto la vacuna saltándose su turno 400 fueron en la Región de Murcia. Nosotros defendemos la regeneración en todos sitios, guste a quien guste y pese a que a quien pese.

Este es justamente el voto útil, el que viene a aportar la centralidad  política y máxime en tiempos en los que la política está excesivamente crispada, excesivamente radicalizada.

-Habla de compra de voluntades en Murcia por el PP, de los cargos que se vacunaron antes de tiempo... ¿Cómo defiende entonces gobernar con ese mismo partido en Andalucía?

-Ahora mismo existe un Partido Popular aquí en Andalucía, que merece todos los respetos, y otro fuera de aquí. Con el PP andaluz estamos haciendo buena política y gestión. Lo que hagan otros partidos y en otros sitios, será cosa de ellos y son sus votantes en esas zonas los que tienen que decidir si quieren seguir votando a un partido que hace ese tipo de cosas. El mío sí que no lo hace.

-¿Han hecho autocrítica de todo lo que ha pasado en las últimas semanas?

-Se ha hecho. En la reunión de la ejecutiva del lunes hubo autocrítica y se asumieron también responsabilidades. Prueba de ello es que quienes gestaron la moción de Murcia ya no tienen esos cargos. 

Creo que es verdad que la gestión de la moción de censura en Murcia no se hizo todo lo bien que debiera. Esto lo tengo claro. La mayoría de la gente del resto España no sabía realmente lo que se estaba produciendo allí, tuvimos un fallo a la hora de comunicar lo que pasaba antes de iniciar todo el proceso.

Tenemos claro que la situación de enorme corrupción que había en el Ayuntamiento de Murcia era absolutamente insostenible, pero ¿tenía que ir de la mano de una moción en la comunidad? Pues no lo sé. A lo mejor en el Ayuntamiento sí había que presentarla y en la comunidad tendríamos que haber optado por separarnos del Gobierno. 

Sea como sea, lo que está claro es lo importante que es aportar regeneración para Cs. El tema de las vacunas estaba ahí y eso también es corrupción. Con eso no podemos comulgar ni estando en el Gobierno.

-¿Se han acabado los movimientos o puede haber réplicas en otros gobiernos como los que hay en ayuntamientos de la provincia? 

-En absoluto. En todos los municipios donde estamos gobernando en Almería, ya sea con el Partido Popular o con cualquier otro partido, la situación va a seguir igual. 

Sería un grandísimo error extrapolar lo que ha ocurrido en otras regiones. En cada sitio concreto lo que hay que mirar son los intereses de esos vecinos. Yo creo que ahora, afortunadamente, los gobiernos que hay más allá de lo que ha sucedido en Murcia y en Madrid se mantienen. Te pongo el ejemplo tanto de Andalucía como Castilla y León donde ahí el Grupo Socialista, aprovechando también la coyuntura, planteó una moción de censura que en modo alguno va a salir hacia adelante.

-¿Se siente traicionada por los miembros de su partido que han activado este camino casi a la autodestrucción? 

-Yo me siento traicionada por los que eran de Ciudadanos y, ahora de repente,  se van en el peor momento. Abandonan el barco. Entonces claro que me siento ciudadana defraudada porque creo uno tiene que luchar en lo que cree hasta el final.

Lógicamente también respeto a aquellos compañeros que ahora mismo, por lo que sea, no están de acuerdo con el proyecto y han dejado el acta para irse a su casa, pero los que rechazan el proyecto pero se quedan el acta, sí que me han defraudado.  Esos no han sido nunca de Ciudadanos. Uno puede cambiar de opinión e irse de los sitios haciendo daño o simplemente cerrar la puerta.

-¿Y dónde ve a su partido dentro de dos años?

-Lo veo en el Gobierno, sin duda alguna. Estamos haciendo una muy buena gestión todos los consejeros naranjas y espero que así lo valoren los andaluces. Estoy convencida que Ciudadanos estará dentro de dos años en el Gobierno de la Junta de Andalucía.

-¿Y Marta Bosquet dónde estará? . 

-Estará donde los afiliados y el partido la pongan. Yo estaré lo mismo en primera fila que en cuarta o quinta. A mí lo que me gusta es trabajar y lo haré esté donde esté.

-¿Pero en Ciudadanos? Dicen que hay quien ya ha llamado a su puerta. 

-No. Yo creo que hay mucha rumorología pero nunca me ha llamado ningún otro partido político.

-Hemos hablado mucho de política pero tampoco es que esté teniendo usted una legislatura tranquila en el Parlamento andaluz. 

-Desde que llegué a mi cargo de presidenta del Parlamento lo he asumido con muchísima responsabilidad, siendo consciente de lo que soy, que mi papel es institucional y eso significa respetar a las cinco fuerzas políticas que conforman la cámara autonómica y dialogar mucho con todos.

Es verdad que la legislatura se está haciendo excesivamente complicada. No porque yo lo diga, sino porque me lo dicen todos los trabajadores que llevan infinidad de años ahí. Creo que todo me está pasando a mí (sonríe). Pero bueno, eso te hace más fuerte y me está ayudando a adquirir mucha más experiencia.

Lo que está claro es que es que había una Marta antes de ser presidenta y otra ahora con mucha más fuerza. 

-Tenía usted el objetivo de acercar el Parlamento andaluz a la gente, abrirlo al público, pero la pandemia le ha frenado en seco.

-Tuve que frenar pero sigo con mi objetivo. Igual que en julio traje la reunión de la mesa del Parlamento a Almería, el jueves la llevé a Cádiz para celebrar los 209 años de promulgación de la Constitución, la Pepa. El próximo mes queremos llevarla a Jaén, así que sigo con mi objetivo. Estoy convencida de que el Parlamento es la institución más desconocida de los ciudadanos.

-¿Echa de menos Almería? 

-Siempre se echa de menos porque amo a Almería, es mi tierra. Pero bueno, yo vengo todas las semanas porque mis hijos están aquí, viven conmigo y lo que toca es estar yendo y viniendo. Es verdad que es inevitable que todas las semanas me tenga que ir a Sevilla pero luego toca volver a casa.