El aval de la experiencia en la enseñanza online del inglés

Este mes, AnGlophone celebra 10 años desde que empezó su andadura en la enseñanza del inglés online. Hablamos con Kerwyn Hawkins, Co-Fundador de AnGlophone junto a la almeriense Elena Moreno, sobre la evolución de la enseñanza online en los últimos 10 años.

¿Cómo empezó la idea de utilizar videoconferencia para impartir clases?

En 2011 veía a muchos alumnos, especialmente adolescentes y adultos, que faltaban mucho a clase, se encontraban muy agobiados por falta de tiempo y acababan abandonando las clases. Esto nos llevó a buscar soluciones para mejorar la continuidad: la opción online les permitía más flexibilidad ya que podían dar clase a cualquier hora y además no tenían que desplazarse. Como decimos en inglés, Where there is a will, there is a way.  Donde hay voluntad, hay un camino.

Poco a poco, fuimos ampliando a empresas como Monsanto, Cajamar, Ingenia Solar Energy, JCarrion etc.  En algunas de estas empresas éramos proveedores de clases presenciales, pero tenían la necesidad de una formación del inglés más personalizada para cada trabajador y ofrecerles una formación más accesible y flexible y nuestra idea les gustaba. Tengo que agradecer a los responsables de RRHH de estas empresas por su confianza en nuestra visión.

Empezamos en 2011 usando Skype para las clases, pero en el 2105 descubrimos una pequeña empresa americana que tenía un producto buenísimo: se llamaba Zoom.  ¿Te suena? Ja, ja, ja.  La calidad era superior y ofrecía muchas opciones interesantes como grabar clases, compartir pantallas, una mejor monitorización, etc.

¿Cuáles son todavía los obstáculos a este tipo de formación?

Las objeciones iniciales son creencias como “no se aprende igual que presencial”, “no es lo mismo que tener a alguien cara a cara”, etc. A veces se asocia a un programa o a tareas digitales en vez de a una clase dinámica.

Nuestra metodología se basa en el aprendizaje del inglés como habilidad, no como conocimiento y mientras se pueda establecer una buena comunicación y conexión entre profe y alumno, se aprende igual de bien. Siempre estamos muy centrados en la selección de nuestro profesorado, ya que además de ser anglosajón de origen, hay que ser profesor, con una formación concreta para saber enseñar ESL (English as a SecondLanguage) y una serie de habilidades interpersonales muy determinadas.

¿Cómo ha afectado este último año y sus confinamientos a la enseñanza online en AnGlophone?

No supuso gran esfuerzo configurar la parte tecnológica. Llevábamos muchos años trabajando con Zoom, pero nos volcamos como equipo en optimizar la enseñanza en Infantil y Primaria para que fuera la mejor experiencia para los alumnos. Me da cosa seguir soltando dichos y frases hechas en inglés, pero hay uno que me gusta que se dice en este caso: Team work makes the Dreamwork.  Nuestro equipo ha hecho un gran trabajo durante el último año.

La enseñanza online debe aspirar a ser igual de buena que la presencial, cada una con sus retos. No creo que se pueda dar una clase online con las mismas herramientas que la presencial, hay que adaptar el formato, el estilo y usar las herramientas adecuadas para que los alumnos estén comprometidos con la clase. Lo bueno es que los niños de esta generación actual son nativos tecnológicos y es sencillo para ellos.

¿Cómo ves el futuro de este formato de enseñanza?

Lo veo más interesante que nunca. Cuando observamos tendencias podemos ver que en EE.UU. el 98% de las empresas ofrecen e-learning y training online (en el año 2017, el porcentaje era de 77%), así que la tendencia va a ir en auge. Además, la generación millenial es nativa tecnológica, valora la formación de calidad y prefiere el formato online.

En los niños, la integración del juego inteligente, la interacción, la colaboración junto a la comodidad para los padres ha hecho que crezca el alumnado en esta modalidad, donde los padres han encontrado una solución en darle una formación adecuada a sus hijos cuando no querían atender a clases presenciales por la pandemia, o porque no se encuentran cerca de un centro de enseñanza de calidad.

El aprendizaje del inglés es una carrera de fondo, no un sprint, así que una metodología adecuada junto con la continuidad día a día es la clave, sea presencial u online.