La deuda del obispado con el Santander supera los 20 millones

La Plaza de la Catedral se llenó ayer de curas de toda la provincia. Cerca de 70 clérigos, desde Adra a Pulpí, desde Chirivel a Rioja, fueron entrando escalonadamente en el salón de actos Juan Pablo II de la Casa Sacerdotal al medio día para recibir información de primera mano del nuevo obispo sobre los cambios en la ‘Diócesis Almeriensis’. 

Tras el revuelo formado por el Decreto papal, que destituye de sus funciones al hasta ahora obispo titular, Adolfo González Montes, el nuevo pastor de la Diócesis almeriense, Antonio Gómez Cantero, quería dar cuenta de su nombramiento y de las atribuciones de la prelatura de la que ahora es exclusivo titular. Don Adolfo queda relegado a exclusivas tareas de predicación y a cantar Misa.

La cumbre de párrocos provinciales fue muy breve, sin embargo, para la importancia de lo allí tratado. Según el hasta ahora portavoz de la Diócesis, apenas duró media hora la reunión, en la que Gómez Cantero explicó a la Curia y a los sacerdotes el Decreto firmado en la Santa Sede por el Papa Francisco y el cardenal Marcos Ouellet que ha facultado el relevo de obispo, tras 19 años de Adolfo González Montes como mitrado almeriense.

Gómez Cantero insistió en la unidad de la Diócesis para afrontar la nueva etapa, habló de la difícil situación económica del obispado, "de la que no se dieron detalles para no humillar más al obispo",  y respondió a algunas preguntas de los sacerdotes.

En breve, el nuevo obispo de facto prevé renovar la curia diocesana, todo el cuerpo de vicarios, que ahora está en funciones, aunque no descarta que algunos puedan ser renombrados.

Es la primera vez en la historia de la Diócesis -al menos desde que se tiene memoria- que el relevo del prelado se produce a través de esta fórmula, antes de que el anterior pastor llegue a la edad de la jubilación. En muchos casos también, a lo largo de la historia, la cátedra de San Indalecio ha permanecido vacante por un tiempo, gobernándose por el titular de la diócesis de Granada en algunos casos.

Antonio Gómez Cantero hace el número 71 de los que se han sentado en la cátedra de San Indalecio, el primer obispo de Almería. Durante los últimos siglos solo se sabe de un obispo natural de Almería, el beato Diego Ventaja Milán, nacido en Ohanes, que sufrió martirio durante la Guerra Civil de 1936.

Mientras Gómez Cantero se reunía en la mañana de ayer con el clero, don Adolfo González Montes, sigue haciendo su vida en el Seminario, asistido por su secretario de siempre, Eduardo Muñoz, ya despojado  de las atribuciones que hasta ahora ostentaba en la Diócesis. No consta, por ahora, cuál será su futuro, aunque todo apunta a que seguirá en Almería, al menos hasta que se jubile el próximo mes de noviembre, cuando cumpla los 75 años. Se entiende que también dejará de pertenecer como miembro a la Conferencia Episcopal de los obispos.

Uno de los asistentes al cónclave de sacerdotes indicó, al ser preguntado por el estado de Adolfo González Montes en los últimos días, que sus primeras palabras, al recibir el Decreto del Papa desde Nunciatura apartándolo de sus cargos, fueron que “en 50 años de cura y 25 de obispo, nunca imaginé que en la iglesia pudiera llegar a pasar ésto”.

Un cántabro con buen color y... actor

El nuevo obispo es un cántabro con buen color de cara y nacido en 1956, que ha pasado por los obispados de Palencia y de Teruel y todo apunta que fue llamado como ‘bombero’ para apagar el supuesto fuego de Almería emanado de la lumbre de unas cuentas diocesanas en las que destaca una deuda de algo más de 20 millones de euros con el Santander. Hasta ahora, sin embargo, no se ha dejado de pagar ni un solo euro, asegura un miembro de la Curia. “Una situación financiera difícil, pero no una quiebra”, apostilla. Y cabe preguntarse qué han hecho el ecónomo y el resto de vicarios y el Colegio de Consultores de la Diócesis para prevenir esa situación tan anómala en las cuentas diocesanas. Gómez Cantero vivirá, por ahora, en la Casa de Espiritualidad de Aguadulce y tiene como secretario a un sacerdote de la Iglesia Oriental. Ha sido extra en de cine, escribe poesía y gusta del dibujo y de la lectura de comic.