Fina Martín
07:00 • 19 jun. 2021
Vive en Tahal, se jubiló con 31 años por una discapacidad. Desde su teléfono resuelve problemas de mecánica e informática a los vecinos de la comarca de Los Filabres-Desierto de Tabernas
¿Cómo llegar a Tahal sin GPS?
Es muy fácil. Vas por la autovía viendo el Desierto de Tabernas y después coges la A-349 por la Sierra de Los Filabres ¡y ahí estamos ! Te encuentras con un paisaje verde de pinos y olivos en una tierra que en los días de lluvia huele muy bien.
Aparte de los animales dibujados en las señales, ¿qué otros hay en la Sierra de Los Filabres?
También hay personas, ¡eh? (se ríe), gente a la que le gusta pasear por la tarde y sentir la brisa fresca de estos pueblos de la comarca. Pero te diré que en esta sierra hay jabalíes, ciervos, liebres, perdices y hasta zorros.
En 2013 una enfermedad lo apartó de su profesión de mecánico y electricista.
Empecé a tener problemas de movilidad; me cansaba mucho, se me dormía el pie y me caía. En el Hospital Universitario de Torrecárdenas me diagnosticaron 'Neuromielitis Óptica'. Cada nueve meses acudo al hospital donde sigo un tratamiento para frenar el avance de la enfermedad.
¿Cómo ha cambiado su vida?
Intento estar estable psicológicamente porque, con esta enfermedad, de estar bien antes, a verte así, es muy complicado. Gracias a la ayuda de mi familia, de mi hija Ainara de 8 años, que comprende y siempre me dice '¿Papi, te ayudo?', me siento tranquilo, y con mi hobby de la electrónica, la mecánica, la electricidad y la informática me evado.
¿A través del teléfono asesora sobre problemas en esas materias?
Sí, me llaman de pueblos de esta comarca y del Almanzora: Tabernas, Macael, Olula del Río, Alcudia de Monteagud ... y, bien por mi telefono 653732467 o videoconferencia, resuelvo problemas técnicos. Así siento que mi vida es útil. La mayoría acude por temas de mecánica de vehículos y carretillas elevadoras. A veces me recogen en una furgoneta para reparar temas de electrónica. Internet es de gran ayuda y funciona muy bien en mi pueblo.
¿De dónde le viene esa habilidad?
Con siete años me atraían todos los aparatos y juguetes que había en mi casa. Desmonté una radio vieja y destrocé la plancha de mi madre para saber cómo funcionaba su interior, ¡casi me mata! (se ríe).
¿Le pasa también con las personas?
Sí, me gusta saber lo que pasa dentro de la cabeza. El exterior, sí, vale, pero le doy más valor al interior de una persona. Primero veo en sus ojos y luego en su alma.
¿Dónde encuentra el alma en un pueblo de cien habitantes?
La encuentro en Ángel y Cristi, en todos mis amigos; en una conversación con los mayores de Tahal, son sabios. Te enseñan lo que han vivido, te cuentan historias interesantes de guerra, de hambre; malos tiempos que desconocemos.
Tahal es un pueblo de montaña. ¿Le es fácil desplazarse en silla de ruedas?
Sí, puedo ir por el pueblo sin problema. Los dos únicos bares que hay han adaptado el acceso al interior para mí y para cualquier persona en mi situación. Por un lado la tienda-bar 'El Cartucho', regentado por el matrimonio Ángel Martínez y Marlen Otero; y el 'Boliche de Noe' que gestiona Noelia Monedero, es un bar precioso con las palabras 'Come y Canta' escritas en su fachada.
¿Y qué se puede comer en Tahal?
El queso de cabra de la producción del pastor Miguel Agüero, que está muy rico; también en 'La fortaleza de Tahal' puedes comprar piensos para animales y queso de cabra; en 'Apícola Samper' Juan Sánchez recoge miel natural, y por supuesto las tapas originales y los guisos tradicionales que hace Noelia.
Puede presumir de casa y de chimenea del año 1900.
Esta casa la compró mi padre cuando yo tenía 7 años y está adaptada para mí. Le costó cuatrocientas mil pesetas que ganó recogiendo tomillo en la sierra. Ahora no se permite su recogida, dice mi padre que hace 30 años esta hierba aromática tenía mucho valor.
¿Adónde va cuando sale a pasear?
Me gusta pasear por la calle 'Corredera' que atraviesa el pueblo, los jardines del parque y la zona del Castillo de Tahal. Escucho los pájaros, pero antes apago el móvil para disfrutar de ese silencio.
En el Castillo de Tahal los Reyes Católicos hicieron noche en la reconquista de Almería. Imagine aquella habitación.
Sería una habitación apropiada para la categoría de reyes; con camas de madera, velos blancos y cortinas. No creo que tuvieran armarios para dejar la ropa (se ríe). Sí te diré que el denominado 'gentil hombre', Rafael J. Sánchez, nacido en Tahal, que socorrió a la reina en un percance con el caballo, está enterrado en la iglesia de Tahal, y para ver la inscripción tienes que hablar con Elisa Martínez, que tiene la llave. Este vecino fue condecorado 'Caballero Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica'.
Cuéntenos una anécdota.
Con 23 años corté un Renault 5 con un disco y esa mitad la acoplé a medio tractor. El vehículo resultante de esas dos piezas era de color verde, mi amigo Felipe lo llamó 'la pepa'. Lo conduje durante un año y nos divertimos mucho, íbamos desde el campo de fútbol hasta Alcudia de Monteagud. En la carretera reían y nos hacían fotos y vídeos. Fue un momento bueno de mi vida que me gusta recordar.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/216956/destroce-una-plancha-de-mi-madre-para-saber-como-funcionaba-su-interior