Los pasajeros del tren que ha salido de la Intermodal de Almería a las 7.32 de la mañana han llegado a la madrileña estación de Atocha a las 16.10 horas, casi dos horas y media después de lo previsto. La causa de este nuevo retraso se encuentra en las tormentas que han descargado la pasada madrugada en Jaén, provocando la interrupción de la circulación en algunos tramos.
Pero también, explican algunos viajeros, en la falta de previsión de Renfe: la compañía ha obligado a realizar parte del trayecto en autobús, un servicio que ha tardado dos horas en recoger a los pasajeros.
La interrupción entre las estaciones de Jódar-Úbeda y Los Propios y Cazorla, pertenecientes a la línea Linares/Baeza-Moreda, se ha producido poco antes de las nueve de la mañana. Una incidencia "provocada por fuertes lluvias caídas en la zona", según Adif. Fuertes precipitaciones que han causado en varios puntos "el desguarnecimiento de la vía" al arrastrar el balasto y deshacer el lecho de asiento de las traviesas, detalla Europa Press.
La situación ha obligado a Renfe a establecer un plan alternativo de transporte "con transbordos por carretera entre Vilches y Moreda", que ha afectado a los servicios Intercity Madrid-Almería en ambos sentidos (los que salían desde la Intermodal a las 7.32 horas y los viajeros que partían de la capital de España a las 8 horas).
Y casi ha sido peor el remedio que la enfermedad: el pasaje no solo ha tenido que realizar parte del trayecto en autobús sino que han tenido que esperar dos horas a ser recogidos.
"Paramos a las nueve de la mañana a la altura de Moreda. Y a los 45 minutos, sin poder bajarnos del tren, nos llega un correo electrónico al móvil en el que nos dicen que por un problema en la vía nos van a llevar en autobús hasta Vilches, desde donde cogeremos el tren hasta Madrid", relata Juan Antonio Petit, uno de los viajeros afectados, a LA VOZ.
Tras el aviso de Renfe, los pasajeros han bajado del tren y han esperado en el andén a que llegaran los tres autobuses que se necesitaban para transportar a los pasajeros, algo que no ha ocurrido hasta las doce del mediodía.
Los autobuses les han dejado en Vilches a las 12.45 horas para coger, otra vez, el tren hacia Madrid. Sin embargo, han tenido que esperar a otros viajeros que llegaban, también en autobús, desde Linares/Baeza, por lo que la máquina no ha arrancado hasta las 13.20 horas.
"Otra pasajera ha estado recogiendo firmas para protestar por la situación. Además, la solución ha sido extraña: ya que ponen autobuses, nos podrían haber llevado directamente hasta Madrid y no habríamos dado tantas vueltas", concluye Petit, a quien el retraso le ha obligado a posponer por unas horas una entrevista de trabajo. Para otra viajera ha sido aún más dramático: ha perdido el vuelo que tenía que coger a las cuatro en Madrid.
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