En la misma semana en la que el Gobierno de la Nación se ha comprometido a subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y el número de desempleados en Almería ha descendido en más de 3.000 personas al cierre del mes de agosto, ni empresarios ni sindicatos consideran que se pueda hablar claramente de la llegada de la recuperación económica tras la pandemia del coronavirus.
Una sucesión de comunicados por parte de la patronal Asempal y de las organizaciones sindicales UGT, Comisiones Obreras y CSIF apunta hacia posturas discrepantes sobre la salida de la crisis en una provincia en la que un 10 por ciento de su población total se encuentra en desempleo.
La última organización que se ha pronunciado al respecto ha sido la confederación empresarial y lo hizo ayer por la mañana en una nota bajo la firma de su presidente, José Cano.
Los empresarios almerienses piden “prudencia ante la realidad que viven empresas, pymes y autónomos que están haciendo un esfuerzo titánico por recuperarse de la crisis provocada por la pandemia”. “No es el momento para el alza del Salario Mínimo Interprofesional”, remarcan, en línea con lo expresado esta semana desde las instancias superiores de la CEOE.
“Estamos en el inicio de una recuperación lenta e incipiente, con indicadores aún lejos de la situación que había antes del inicio de la crisis. Hay sectores productivos que experimentan pérdidas y otros están tratando que coger aliento tras un año y medio muy duro, sin apenas ayudas y con márgenes muy apretados, soportando además mayores incrementos de costes, como un precio desorbitado en la factura eléctrica y un alza de los costes de producción”, ha opinado José Cano
La patronal pone el acento en los autónomos, con 61.393 almerienses inscritos en los registros oficiales. Según el presidente de Asempal, se trata de un colectivo que “ha sido especialmente castigado por la pandemia y con la caída del consumo, también sufrirán en sus bolsillos las consecuencias de la subida del SMI ya que verán incrementada su cuota de autónomos”.
Mejoras salariales
Por el contrario, desde UGT sí ha defendido públicamente un aumento del salario mínimo. Carmen Vidal, secretaria general de UGT Almería, se congratulaba esta semana de la bajada del paro en la provincia aunque recordaba la “necesidad” de mejorar los salarios de los trabajadores y sus condiciones laborales.
“La evolución de la economía en relación al IPC asi como el desbordado incremento de la luz constatan la necesidad de subir el SMI hasta los 975 euros en este año 2021 así como estipular las subidas del 2022 y 2023 para cumplir con el compromiso adoptado en la Carta Social Europea según el cual el SMI debe ser igual al 60% del salario medio en España”, sostenía Vidal Salcedo en un comunicado.
Su homólogo en Comisiones Obreras, Antonio Valdivieso, compartía un análisis similar. Para Antonio Valdivieso, “la bajada en el número de parados y paradas refleja la tendencia de los últimos meses donde la economía da atisbos de una recuperación progresiva pese a que todavía no hemos superado la actual crisis”.
“A pesar de ser un dato positivo, los contratos siguen padeciendo de los mismos problemas, precariedad y temporalidad, lo que supone que en ocasiones veamos como aumenta la siniestralidad laboral, debido en parte a la falta de estabilidad laboral. Todavía muchas empresas siguen con trabajadores en ERTE - sentencia el líder sindical -, por lo que pedimos a los empresarios que sean consecuentes y recuperen a esos empleados”.
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