Si es la primera vez que usted pisa Almería y le dice su guía turístico que le van a llevar a visitar el ‘Mesón Gitano’ lo primero que piensa es en coger las castañuelas, los tacones y en tomarse un vino. Algo así como si le dijeran que le llevan a visitar las cuevas del Sacromonte pero en una versión almeriense. Y realmente algo de razón llevaría porque la zona ubicada bajo la Alcazaba de la capital era eso, un ‘Mesón Gitano’, un pequeño hotel que contaba con zona de celebraciones, un tablao flamenco y un restaurante como gran atractivo para los turistas.
Pero claro, cuando ese visitante recién estrenado llegara al edificio que es hoy el Mesón Gitano se debatiría entre la sorpresa y la decepción porque allí ni hay un mesón ni hay nada relativo a la cultura gitana. Por eso, el Ayuntamiento de Almería ha decidido, a propuesta de los que están realizando la musealización del espacio, cambiar el nombre y adecuarlo a la realidad de lo que van a encontrar bajo ese enorme inmueble rosado de ventanas raras, toda una joya arqueológica. Así, a partir de ahora, este espacio se llamará ‘Yacimiento Arqueológico Barrio Almohadí’.
Desde el Ayuntamiento son conscientes de que por muchos carteles que se coloquen por la ciudad con esta nueva nomenclatura los almerienses seguirán hablando del Mesón Gitano pero el reto está en que se incluya la palabra ‘yacimiento’ cuando se le nombre y que de esta forma los visitantes encuentren aquello que busquen, un espacio arqueológico único.
Apertura
A pesar de que esta decisión de cambio de denominación ya está tomada, de poco servirá hasta que el museo pueda abrir sus puertas. No habla de fechas la concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, posiblemente porque a lo largo de los años se han dado demasiadas, pero sí que explica que “ya se ha cursado la solicitud a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía para pedirle la cesión de las piezas que aparecieron en la excavación arqueológica para su exposición en este espacio así como la solicitud para formar parte de la red de museos” aunque parece que hay algunos puntos de disensión por lo que todo está a la espera de un encuentro entre ambos.
Mientras todo se resuelve para el interior de este espacio museístico, este mes de noviembre arrancarán los trabajos en el exterior, exactamente en los accesos a la calle Fernández, mediante la creación de un talud vegetal, así como a la consolidación de los restos de Muralla, Torreón y restos tardorromanos. Además de la intervención a desarrollar en el talud inferior de Calle Fernández y en la zona Torreón de Poniente junto al Mesón.
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