Antonio Heras llegó a Podemos en el mismo momento en el que comenzaba a caminar la formación en Almería. Ha pasado ocho años, con algún paréntesis, con responsabilidades orgánicas y ahora, tras ejercer de portavoz local, ha decidido retirarse a descansar no solo del cargo, sino hasta de la militancia.
¿Por qué se marcha de Podemos? Se ha dado hasta de baja.
Llevo prácticamente ocho años siendo la máxima representación de Podemos a nivel municipal salvo algún lapso de tiempo, y lo cierto es que la vida orgánica del partido, y más cuando hay que partir de cero, es vertiginosa y agotadora. Hay que hacer una labor de resolución de problemas, de lidiar en disputas, que produce un importante desgaste.
Ahora mismo reconozco que necesito un descanso ineludible. Y la verdad, como no me veo en el partido sin implicarme, he optado por retirarme del todo.
¿Le ha pasado factura sus discrepancias con la concejal de Podemos en el Ayuntamiento? Era público que las líneas de trabajo no son coincidentes.
Ni la concejala ni el Grupo Municipal de Podemos han respondido como deberían, no han estado a ningún nivel como se esperaba en el partido y así lo he hecho saber no solo en Almería sino que puse todo en manos de la Comisión de Garantías y allí se ha resuelto de forma objetiva, aséptica, sin entrar en guerras. Y esto es una pena porque nos costó mucho poder entrar en el Ayuntamiento.
Pero es cierto que se han manifestado contrarios a su actitud antes los presupuestos municipales, por ejemplo. Al igual que lo ha hecho IU que aunque en la capital no confluyó con ustedes, sí que son ‘socios’ de alguna manera.
Evidentemente. Pero es que aquí no ha habido ningún tipo de división interna, lo que ha pasado es que el Grupo Municipal ha trabajado totalmente desvinculados del partido. De hecho, con su primera abstención nos vimos obligados a emitir un comunicado en el que nos desligábamos de su postura porque ella no ha hablado ni consultado nada.
Entiendo perfectamente que IU hiciera lo mismo. Siempre ha habido muy buena relación con ellos en Almería.
Pero no les valió para ir juntos en las municipales.
Porque el equipo de Podemos no quiso negociar. De hecho, yo que iba en esa la candidatura en las primarias de la formación, perdí totalmente la confianza en sus miembros y decidí no participar en ella cuando se me apartó intencionadamente del equipo de negociación para la posible confluencia.
¿Y ahora en manos de quién se queda Podemos en Almería?
El puesto de nuevo portavoz municipal se ha quedado en manos de Alejandro Lorenzo. Estoy convencido que Unidas Podemos tiene mucho futuro en Almería. Además tiene muchos logros que transmitir que se han conseguido por el Gobierno. Necesitamos perspectiva para valorar esos logros sociales y no nos podemos olvidar que hacer política es so, mejorar la vida de la gente, logros efectivos para todos.
Sorprende que de aquellos que arrancaron la andadura de Podemos en Almería ya no quede casi nadie. Recuerdo a Lucía Ayala, Raúl Quinto... y ahora usted. Han quemado muy rápido las etapas, ¿no?
En el caso de las personas de las que habla creo que se han retirado totalmente pero mi intención es seguir en la vida política. El formato o la forma está por ver. Seguiré participando desde las asociaciones, a través de plataformas que puedan surgir. Cada persona participa de una forma, yo voy a participar muy activamente.
Habla de plataformas. ¿Se ve en un proyecto con Yolanda Díaz?
Perfectamente. Desconozco si se materializará y exactamente en que podría consistir. Pero cualquier proyecto que apueste por aunar a la izquierda en mi ciudad, en mi comunidad autónoma o en mi país me interesa. Si el proyecto se pone en marcha, sería interesante participar.
Yolanda Díaz ha demostrado que tiene una manera de hacer política diferente de las formas clásicas. Hay que apostar por una visión más abierta, más amplia de la que se genera desde los partidos. Ha sido capaz de generar un liderazgo, una esperanza con nuevas formas de actuar.
¿Ha merecido la pena la aventura de Podemos?
Absolutamente. El cambio en la política y en la sociedad española es notable. Hemos conseguido hasta que llegue la democracia interna al resto de los partidos. Ha merecido y sigue mereciendo la pena.
Es cierto que ahora mismo estamos en un momento de transición, de sucesión de un liderazgo tan potente como el que tenía Pablo Iglesias y hay que encontrar la fórmula. Pero no nos podemos olvidar que hemos conseguido desde que se llegó al Gobierno una subida del SMI del 30%, la reversión de la reforma laboral, conseguir medidas que fomentan la igualdad... Estoy muy orgulloso de lo que se ha conseguido.
Y a nivel personal ¿le compensan estos ocho años de cansancio?
Por supuesto. Es cierto que necesito descansar pero miro mi trayectoria de forma positiva. Tengo mucha ilusión porque en Unidas Podemos en Almería se queda en buenas manos y yo podré seguir haciendo política, porque la hacemos todos los días, desde otra posición. En esta ciudad hay, para bien y para mal, muchísimo aún por hacer y estaré ahí para colaborar a ello.
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