Ampliar el control y el monitoreo de la posible afección al acuífero del Bajo Andarax por el incremento de la extracción de agua marina por parte de la desaladora de Almería es el objetivo con el que el Ayuntamiento de la capital ha decidido sacar un nuevo contrato menor por valor de 14.990 euros más IVA.
Explica la concejal de Sostenibilidad Ambiental, Margarita Cobos, que actualmente “se realiza el monitoreo para comprobar la temperatura del agua, la conductividad, y este nuevo estudio es una vuelta más de tuerca para tener aún más control de cara a la posibilidad de aumentar el número de bastidores que están operativos”.
Asegura Cobos que durante este tiempo que han estado funcionando tres bastidores, los resultados obtenidos “no han variado” y asegura que “aún no hay una fecha para poner en marcha ninguno más”.
Contrato
Exactamente lo que se va a poner en marcha en la desaladora a través de este nuevo contrato de monitoreo son ocho nuevos puntos de control, de los cuales tres piezómetros estarán situados en las cercanías de la zona de captación de la desaladora, dos piezómetros de la red de control de la Junta de Andalucía y tres sondeos de propiedad privada aguas arriba de la zona de captación de la desaladora.
Las mediciones se van a realizar de forma mensual en los piezómetros de control ubicados en las proximidades de la planta, cuya finalidad es determinar las posibles afecciones de los bombeos realizados en el área. También habrá registros mensuales de la conductividad eléctrica y temperatura.
Se realizarán tomas de muestras y análisis físico-químico de las aguas en dichos puntos de control a diferente profundidad, a fin de establecer la evolución de la zona de contacto agua dulce-agua de mar. Según recoge el informe técnico, la toma de muestras para su caracterización hidrogeoquímica se llevará a cabo dos veces durante el contrato.
Para la concejal de Sostenibilidad Ambiental este incremento del control sobre la explotación de la desaladora demuestra “el compromiso” por parte del Ayuntamiento de tener en cuenta cualquier problema que pueda acarrear el incremento del número de bastidores antes de proceder a ello.
Cabe recordar que este aumento se producirá, posiblemente, cuando ya toda la ciudad esté conectada con los depósitos a de La Pipa. Unos trabajos de conexión que está elaborando la Consejería de Agricultura y que se encuentran en marcha en diferentes zonas de la ciudad como la Carretera de Níjar o la calle La Peseta.
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