“Nos dijo que tenían que matarnos por maricones solo por darnos un beso”

Dos jóvenes veinteañeros de la capital fueron agredidos este lunes en un parque del barrio de Nueva Andalucía cuando caminaban tranquilamente y se dieron un beso que desató la irá de un varón que se encontraba en el mismo lugar de los hechos y que ha dejado a E.M. y a su pareja, los dos agredidos, con el miedo en el cuerpo aún 24 horas después de la agresión.

"Estábamos tranquilos sin molestar a nadie y solo nos dimos un beso", explica E. M., uno de los jóvenes agredidos con la voz entrecortada mientras relata a LA VOZ cómo sucedió la agresión que el detenido cometió contra él y su pareja en la Plaza Jorge Guillén de la capital, en la zona donde se encuentra el supermercado Carrefour en el antiguo Pryca, por un simple beso.

Fue alrededor de las 17:30 horas de la tarde, cuando los dos jóvenes de poco más de 20 años se encontraban dando un paseo y apareció un varón, de 39 años de edad y nacional de Guinea Bissau, quien tras ver cómo se daban un beso comenzó a insultar y a perseguir a los dos jóvenes. "Empezó a decirnos maricones ojalá os muráis y nosotros nos asustamos muchísimo, porque de repente que vayas por la calle y una persona comience a decirte esas cosas no me ha pasado en mi vida", relata E.

Agresión

Así, los jóvenes, tras ver la actitud violenta con las que se dirigía hacía ellos el agresor, que según cuentan fuentes policiales mide alrededor de 1,90 metros y se encuentra en España en situación irregular, comenzaron a apartarse del lugar y llamaron al 112 para informar de lo sucedido. Pero en ese momento el agresor se percató de que estaba usando el móvil y le golpeó en la mejilla. "Me dio con la mano abierta y con mucha fuerza en la cara. Ahora la tengo hinchada y arañada y no puedo ni comer del dolor que tengo en la mandíbula", relata E., quien fue atendido en la Bola Azul de las lesiones.

Pero ahí no se quedó la agresión, pues después de que el detenido se fuera "tan tranquilo" y antes de ser detenido en la calle Manuel Azaña, siguiñó insultando a los jóvenes cuando apareció la Policía. Fue en ese momento cuando volvieron a recibir diversos insultos por parte de este, que comenzó a decirle a sus víctima "maricones" y "eso no se hace, qué asco" en referencia al beso que se habían dado, por lo que llegó a decir:  "Tenían que mataros por maricones".

Ahora, el varón de 39 años se encuentra detenido en la Comisaría de la Policía Nacional en Almería, acusado de un delito de odio, teniendo previsto su puesta a disposición judicial mañana día 27 de abril. "Tenemos miedo de encontrárnoslo en el juicio, pero hay que denunciar", destaca el joven.

Los agredidos

Por su parte, E. M. y su pareja, los dos jóvenes de la capital agredidos el lunes, se recuperan ahora del ataque, que en el caso de E.M. le dejó una herida considerable en el rostro y a su novio con "ansiedad" solo por "amarse".  "Quiero dar un mensaje a todas las personas que estén viendo esta noticia, hoy me ha pasado a mí y gracias a Dios estoy vivo para contarlo, pero ese mismo agresor si no le denuncias y te callas puede agredir a otra persona y no puede tener la misma suerte que he tenido yo de contarlo... Denunciad, hay salida. No tengáis miedo de contarlo", apunta el joven.

Del mismo modo, la agresión sufrida por los dos jóvenes ha sido condenada esta misma tarde por el colectivo de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales de la provincia de Almerí, Colega, que ha indicado a través de su presidente, Antonio Ferre, estas actitudes que impiden "vivir en libertad", por lo que ha reclamado "más respeto a la diversidad sexual y de géneros" ya que este tipo de agresiones, según ha considerado, "últimamente van en aumento y acompañadas del discurso de la extrema derecha y del feminismo transexcluyente".