La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía lleva esperando desde finales del pasado mes de enero un informe del Ministerio de Transportes preceptivo para poder trasladar vigas para el último tramo de la Autovía del Almanzora.
Fuentes del Ejecutivo autonómico han explicado a este periodico que fue el 25 de enero cuando se inició de manera oficial el expediente para que el Gobierno dictamine una autorización previa al ‘ok’ de la Dirección General de Tráfico (DGT) para poder transportar las vigas desde la provincia de Sevilla hasta la zona de Zurgena, donde está en obras el tramo La Concepción-A7 (Huércal-Overa).
Desde entonces, hasta en tres ocasiones se han enviado requerimientos a la Consejería de Fomento para “subsanaciones” y en todas ellas se ha respondido con “agilidad”, pues la Junta no tiene interés alguno en “retrasar las obras”. Todo lo contrario.
Tres estructuras
Las vigas que se esperan en ese tramo de la Autovía del Almanzora tendrán como destino tres estructuras diferentes (viaductos). En concreto son para las estructuras E-8 (Vereda Cuesta Blanca), E-9 (Barranco del Muerto) y E-10 (junto al enlace a través de la Autovía del Mediterráneo).
La titular de la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo, visitó las obras a mediados de febrero de este año. Aún no había pasado ni un mes desde que se pidió ‘permiso’ al Ministerio de Transportes para ese transporte de vigas desde la provincia hispalense.
“En la estructura E-8 (Vereda de la Cuesta Blanca), tanto los dos estribos como las dos pilas del paso superior se encuentran ya hormigonadas casi en su totalidad, por lo que que se colocarán las vigas en breve, mientras que en la estructura E-9 (Barranco del Muerto) ya se ha finalizado la construcción de la cimentación de escollera sobre la que apoyarán los dos estribos, y se está realizando la puesta en obra de la tierra armada”, describía el departamento que dirige Carazo en un comunicado de prensa tras esa visita.
Entonces, se calculaba que el grado de ejecución de las obras estaba en un 20 por ciento y en las fechas actuales se estima en un 25 por ciento, aproximadamente.
Casi dos años
El tramo en ejecución, que se adjudicó a finales de julio de 2021 a la UTE formada por las constructoras San José, Eiffage y Pérez Jiménez por 24 millones de euros, cuenta con una longitud de 3,6 kilómetros y un plazo de ejecución de 22 meses.
Desde el punto de vista técnico se explica que el proyecto incluye la ejecución de dos nuevos enlaces, situados al inicio y al final del tramo. El primero estará situado en el kilómetro 3,2 de la nueva autovía para facilitar el acceso a la nueva central fotovoltaica y las pedanías de La Concepción y El Palacés, en Zurgena, y será de tipo diamante con pesas (glorietas). El último enlace sirve de conexión entre la nueva autovía A-334 y la A-7, con una tipología más compleja, ya que también incluye la conexión de la AL-7106 con ambas autovías y con la zona de servicios situada en la calzada derecha (dirección Murcia) de la A-7. El trazado salva a su paso el Barranco del Muerto mediante un viaducto de 45 metros, uno de los que espera la llegada de las vigas en un transporte especial desde Sevilla.
50 millones
A lo largo de la última legislatura sí se ha podido terminar y abrir al tráfico un tramo anterior al de La Concepción-A7. Se trata del comprendido entre El Cucador y La Concepción, en el término municipal de Zurgena.
A 50 millones de euros se eleva la cantidad que ha destinado en estos últimos años la Consejería de Fomento e Infraestructuras a ambos tramos de la Autovía del Almanzora.
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