Hallan restos de uno de los baluartes de la Antigua Puerta de la Carnicería

A pesar del paso de los años, de las múltiples construcciones que se han realizado en la zona sin ningún tipo de precaución o de aquellos que optaron por reutilizar los restos que encontraron para levantar sus viviendas, los estudios arqueológicos que están casi culminados en la calle Almanzor han localizado restos de la Almería medieval.

La documentación existente levantaba mucha expectación ante lo que pudiera salir en esta segunda fase de unos trabajos que ha vuelto a desarrollar Patrimonio Inteligente y lo cierto es que la realidad ha cumplido.

Así, además de comprobar que ese muro anterior al siglo XII que se encontró en la zona de encuentro entre calle Almanzor y calle Viña es parte de esa Muralla de Levante de época califal y que se demolió en el siglo XVIII durante el reinado de Carlos III, también han aparecido restos de uno de los baluartes de la Antigua Puerta de la Carnicería que daba acceso a la Medina.

Así se lo comunicaba el arqueólogo encargado de la excavación, Celso Sánchez, al alcalde de la capital, Ramón Fernández-Pacheco, a la concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, y a los técnicos municipales en una visita a la zona de los trabajos.

Se trata de un gran hallazgo que para el alcalde “viene a potenciar las posibilidades de un entorno único y muy valioso desde el punto de vista histórico, patrimonial, y por supuesto, también turístico”.

El primero de los puntos fundamentales sobre los que se ha trabajado en esta excavación ha sido el tratar de confirmar que ese muro que parecía califal, que pasaba por el mismo sitio que estaba documentado que discurría la muralla pero que estaba rodeado de otras construcciones y basuras que lo hacían casi imposible de identificar, era verdaderamente parte de la Muralla de Levante.

Trabajos
Durante muchos días se han estado sacando camiones con tierra, escombros y basura para que finalmente Celso Sánchez pudiera afirmar que efectivamente se está ante una sección de muralla. “Cuando encontramos ese muro en la primera fase vimos que su forma de construcción era típica de la época califal. Se trata de la construcción en espiga o en espina en la que las piedras se van tumbando y apoyando en la siguiente haciendo ese dibujo”, explica el arqueólogo que añade que lo que no les cuadraba era el grosor del muro, unos 50 centímetros. “La muralla está seccionada, como si estuviera cortada por la mitad. Así hay una cara exterior, enlucida, que da hacia la Alcazaba y lo que vemos desde aquí (se miraba desde la calle Almanzor) es el interior de la muralla, le falta la mitad del muro”, aseguraba. Sin tener muy claro el motivo de esa sección, sí que recordaba los múltiples arreglos que sufren esas murallas. 

Además del tramo de muro encontrado en la primera fase, se ha localizado otro que se extendía por encima de una de las cuevas que hay en este espacio y que seguiría hacia el Bastión del Saliente de la Alcazaba y seguiría hasta conectar con los restos del siglo X localizados en el exterior del monumento hace unos años, lo que refuerza la tesis de que se trata de la muralla califal.

Después de la investigación de la muralla, siendo conscientes de que en la calle Almanzor se encontraba la Antigua Puerta de la Carnicería para acceder a la Medina, comienzan las excavaciones en las que encuentran una cimentación interior de uno de los dos baluartes cuadrangulares que flanqueaban esa puerta. A esto se le suman de refuerzos posteriores en tres caras diferentes de los que quedan restos del interior.

La intención municipal pasa por la puesta en valor de ambos hallazgos. Así tanto la muralla como este baluarte quedarán a la vista de los almerienses y visitantes aunque aún es pronto explicar el proyecto de recuperación ya que “se va a proceder a la expropiación del edificio ubicado entre la calle Almanzor y Viña y su demolición. Cuando se realicen los trabajos arqueológicos allí y se sepa exactamente lo que hay, se podrán tomar decisiones para encontrar una solución unitaria para toda la zona”, explicó la concejal de Urbanismo.

Centro Histórico
Y es que la intención pasa, según el alcalde, porque “hallazgos como, en su día, los del barrio Andalusí, encontrado durante las labores de rehabilitación sobre el Mesón Gitano, o ahora estos, también a los pies de las murallas, deben ser abordados como elementos sustanciales de un proyecto global de reactivación del Centro Histórico de Almería que estamos desarrollando desde el Ayuntamiento para convertir, de una vez por todas, el eje de nuestra Plaza Vieja, San Cristóbal, La Hoya, La Alcazaba y el Mesón Gitano, en un recorrido por nuestra historia”.

Cabe recordar que también en esta misma zona se localizaron viviendas datadas en el siglo XII y, de hecho, se puede ver el suelo de una habitación completa, y que otro de los grandes atractivos, a pesar de que ni llevan a la Alcazaba ni son tan antiguas, son las cuevas que en su día fueron despensas, cochineras, o que fueron elaboradas para poder protegerse durante la Guerra Civil como refugios.

Se trata de todo un yacimiento que enlaza con la historia que tiene alrededor.