Este candidato lleva a Almería en el pecho. Evidentemente quiere a su tierra pero no es eso a lo que me refiero. Diego Crespo, número 1 de Adelante Andalucía al Parlamento andaluz por Almería, se ha ayudado de su ropa, de esas camisetas que compra en Riot Cinema Shop, para mostrarle al resto de los miembros del plenario del antiguo Hospital de las Cinco Llagas durante cuatro años desde el Toblerone al Desierto Tabernas. Es de llevar moda almeriense y recordarles a sus compañeros los motivos de su lucha.
Es de izquierdas desde que tiene uso de razón. Cierto es que su inquietud política, o al menos su vertiente activista, se inició con el encierro de inmigrantes en la Universidad de Almería que clamaban contra la Ley de Extranjería y pedían un nuevo proceso de regularización. De ahí pasó a esas movilizaciones contra la LOU que nos tuvieron a todos los universitarios de la época en huelga para culminar su camino en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y el 15-M. Todo un currículum.
Pero es que esta implicación social la ha aprendido en casa y la lleva en la sangre. Su abuelo materno fue de aquellos republicanos de izquierdas que terminó encarcelado y su padre militó en ‘Bandera Roja’ y era antifranquista. Parecía difícil que con esos antecedentes Diego Crespo pudiera estar en un lugar ideológico diferente. También es cierto que luego él mismo se ha encargado de encontrar su espacio.
Confluencias
Este profesor de Educación Física que ha trabajado como orientador socio-laboral en La Chanca debutaba en una lista electoral en ese momento en el que los anticapitalistas (de los que forma parte), caminaban de la mano de Podemos e Izquierda Unida. Eran tiempos felices de confluencia y en ella se movió Crespo como pez en el agua durante los tres primeros años en el Parlamento andaluz. Allí preguntó por los alquileres, por temas educativos o por energías renovables.
Llegó entonces la crisis de la coalición y la salida de Teresa Rodríguez de la formación. Tocaba entonces decidirse entre permanecer en el grupo parlamentario o macharse con la que había sido su líder. Dice Crespo que la decisión “fue fácil” porque él entró en 2018 en “un proyecto político izquierdas, que tenía una misión clara en el territorio, un proyecto andaluz” y para él, ese proyecto es el de Teresa Rodríguez con quien vuelve a presentarse en este 2022 por la ‘nueva’ Adelante Andalucía.
Diferente
Aunque está tan ilusionado como la primera vez, reconoce que la campaña es muy diferente. Ahora tienen menos espacio en los medios de comunicación, no tienen el mismo personal alrededor de la organización (es que Izquierda Unida y Podemos aportaban mucha experiencia electoral y de coordinación entonces), pero todo esto lo están supliendo con “ganas y voluntarios que ayudan de forma desinteresada”.
No sabe si volverá a tener sillón en el Parlamento andaluz, todo dependerá de lo que la gente decida votar el próximo 19-J, pero pase lo que pase se siente muy satisfecho del trabajo hecho, del camino recorrido y de la gente conocida.
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