El águila de Cajamar sobrevuela Las Mariposas para alejar a las gaviotas

Aquellos almerienses que observan las particularidades de la capital se han encontrado en los últimos días con una imagen insólita; una especie de gran ave rapaz, un águila según algunos, sobrevolando el emblemático Edificio de Las Mariposas, sede de la Fundación Cajamar y de su Centro de Cultura.

Y sin embargo tan pájaro no es real; se trata de una cometa que se mueve a impulsos del viento y que, efectivamente, simula la forma de una rapaz. Su presencia es la respuesta de los responsables de la sede de la entidad financiera a la presencia frecuente en la especie de faro que culmina el edificio en su parte alta, y en los tejados, de un notable número de gaviotas.

La decisión de colocar esa cometa 'disuasoria' se adoptó por la actitud agresiva de estas aves marinas, sobre todo en la época de cría, que han dado más de un susto a aquellos que pretenden acceder a la terraza que hay en la azotea de Las Mariposas. Las visitas a esta zona fueron suspendidas a causa de la pandemia, pero antes de eso las gaviotas ya habían causado algún problema y numerosos sustos, afortunadamente sin consecuencias.

El propio vicepresidente de Cajamar, José Luis Heredia, explica que el objetivo que se perseguía con la colocación de tan singular cometa no era otro que intentar alejar a esos molestos 'vecinos'. Señala no obstante que si bien en los primeros días y semanas se mostró como una solución más o menos eficaz, con el paso del tiempo las gaviotas se han acostumbrado a la amenazante presencia de la supuesta águila y, en la actualidad, conviven con ella sin mayor inquietud.