Sin indicios de delito en la desaparición de Alfonso Sevilla

La Guardia Civil ha descartado la existencia de indicios de criminalidad en la desaparición de Alfonso Sevilla Portillo de 70 años de edad, antiguo director de la Plataforma Solar de Tabernas y responsable de los planes de restauración ambiental y forestal de la Fundación Cajamar.

La Comandancia de Almería inició una investigación tras la denuncia de la desaparición de Sevilla durante una travesía el pasado 24 de junio. Según las diligencias, salió desde el puerto deportivo de Aguadulce en un velero. Tenía amplios conocimientos y experiencia en la navegación, pero viajaba solo.

La embarcación, según ha podido saber LA VOZ, ha sido avistada en las últimas horas en un punto cercano a las aguas territoriales de Argelia, a donde habría sido arrastrada por los vientos de poniente que se sucedieron en esas jornadas.

La asociación SOS Desaparecidos, que preside el almeriense Joaquin Amills, emitió una alerta en redes sociales para denunciar la ausencia de Alfonso Sevilla y pedir colaboración ciudadana. Sin embargo, las pesquisas apuntan a un desenlace accidental.

Experiencia

Fuentes oficiales de la Comandancia de la Guardia Civil afirmaron este martes en declaraciones a LA VOZ que no se han hallado indicios de ningún delito donde Alfonso Sevilla hubiera podido ser víctima.

Las pesquisas apuntan a que pudo caer al mar durante la navegación. La amplia franja marina donde se produjo el suceso y, más aún, la dificultad para acotar el momento temporal exacto hacen imposible la búsqueda.

Alfonso Sevilla Portillo era uno de los mayores especialistas a nivel internacional en las energías renovables y su aprovechamiento. Persona querida y respetada en el sector, tenía grandes conocimientos de navegación, afición que cultivaba de manera recreativa.

Tras dejar la dirección de la Plataforma Solar de Tabernas, creó la empresa Geohabitat para el desarrollo de proyectos de instalación de modelos renovables, una tarea que le llevó a diseñar y desarrollar varios proyectos de gran embergadura en países como Alemania, China o Estados Unidos, entre otros. 

No consta que el barco haya sido remolcado hasta España de nuevo tras su hallazgo en aguas internacionales.