El calentamiento del mar reaviva la amenaza de gota fría para este otoño

El mar registra estos días temperaturas que superan notablemente las medias históricas. Según los datos hechos públicos esta semana por la Red Exterior de Boyas del Organismo Público Puertos del Estado, la ‘boya de aguas profundas del Cabo de Gata registró el pasado lunes un récord absoluto en el área del Mediterráneo español con casi 28 grados centígrados de temperatura.

Ese hecho ha despertado todo un ‘tsunami’ de opiniones en torno a la posibilidad de que la fuerte elevación de la temperatura del agua del mar haga presente una de las amenazas más temidas en la zona del sureste español, la posibilidad de que se sucedan las conocidas como ‘gotas frías’, rebautizadas en estos últimos años como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos).

Las mediciones
Quienes dan la voz de alerta, caso del meteorólogo, y conocido ‘hombre del tiempo’ de la televisión Mario Picazo, o del experto de la red Meteored Samuel Biener, advierten que los episodios de altas temperaturas que se vienen registrando desde el pasado mes de mayo no sólo afectan a los ciudadanos, las zonas rurales o las ciudades, sino que tienen una segunda lectura: “el mar está subiendo de temperatura de forma desmesurada y las consecuencias se notarán tarde o temprano”.

En el caso de Almería, la medición de casi 28 grados centígrados como registro máximo de este mes de julio se obtiene de la boya del situada frente a la costa del Cabo de Gata y a tres metros de profundidad; pero hay otras mediciones que señalan que en aguas más superficiales y más próximas a la línea de costa están ya por encima de los treinta grados, lo nunca visto.

En aumento
Esos registros son impropios del mes de julio y sólo son equiparables a los 27,9 grados medidos en apenas dos ocasiones en los meses de agosto de los diez últimos años, concretamente en las zonas de San José y de Níjar-Cabo de Gata.

La cuestión es que si se mantiene la progresión actual, es más que probable que este próximo mes de agosto se superen con nitidez las máximas históricas de temperaturas del agua del mar en la práctica totalidad de las zonas litorales de la provincia y, por supuesto, en las zonas de baño.

Para José Miguel Viñas, meteorólogo de la sociedad Meteored, esta situación supone un “calentamiento muy anómalo en las aguas superficiales del Mediterráneo”, una notable ola de calor marino que en zonas costeras como la de Almería superan ya los treinta grados, “lo que acarrea una desviación de hasta 6 y 7 grados por encima de los valores que se alcanzan en esta época del año”.

Riesgo de DANA
Otros expertos, caso de Eduardo Romay, del colectivo almeriense de analistas climáticos Cazatormentas son más cautos a la hora de evaluar esa posibilidad, ya que el calentamiento del agua del mar, con ser un factor de riesgo de ‘gotas frías’, no es el único y, de hecho, sostiene que “ya puede estar el mar a 50º que si no se dan otros ingredientes, como aire frío en altura, inestabilidad dinámica o vientos húmedos de levante, puede no caer ni gota, como ya ocurrió en el año 2017, cuando el Mediterráneo estaba poco más o menos como ahora y el otoño fue uno de los más secos que se recuerdan”.

En cualquier caso todos coinciden que con un agua del mar tan caliente como la que se da en la actualidad, el riesgo está ahí y, por tanto, subyace la amenaza de la llegada de una ‘gota fría’.