Disposición para cumplir la Ley de Memoria

La aprobación de la Ley de Memoria Democrática y la salida de los restos de Gonzalo Queipo de Llano y Francisco Bohórquez de la capilla de la Macarena en Sevilla, se vuelve a poner sobre la mesa los símbolos de época franquista y los nombres de calles que siguen quedando en la capital almeriense después de que las asociaciones de memoria lleven años reclamando una actuación sobre ellos.

Uno de estos elementos, que llegó en su día hasta a tener empresa contratada para la actuación, es el escudo que preside la Escuela de Arte de Almería ‘Carlos Pérez Siquier’. Preguntado el delegado de Cultura, Turismo y Deporte, José Vélez, por esta situación, asegura que preguntará en Sevilla por la situación en la que se encuentra el expediente y se muestra “totalmente colaborador” para dar cumplimiento a la nueva ley “como no podría ser de otra manera”.

Cumplir
Esta norma no pone plazos para ser cumplida sino que, una vez acabado el trámite legislativo, lo que toca es cumplirla. Esto pone deberes también al Ayuntamiento de la capital ya que en su callejero continúan nombres como calle Belchite, en recuerdo de una de las batallas más sangrientas de la Guerra Civil; Crucero Canarias, nombre del barco que bombardeó la ciudad durante toda la guerra y participó en la masacre de la carretera Málaga-Almería; Batalla de Brunete, que acabó con la victoria del bando nacional sobre Madrid, y Alto de los Leones, en conmemoración de la toma del puerto de la Sierra de Guadarrama.

Están las calles Rafael Martínez Sansón, en El Tagarete, por el teniente de Carabineros que se sumó al levantamiento del 36, y General Moscardó, en Oliveros, que participó en varias operaciones en la guerra. 

La alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez, se muestra abierta a hacer los cambios que sean necesarios aunque para eso, apuesta por un estudio pormenorizado de cada uno de ellos.

Además, recuerda que el Ayuntamiento espera poder recibir ayudas para la exhumación de las fosas comunes que hay localizadas en el cementerio de San José y que también entrarían dentro de esta normativa de memoria democrática.

Habrá que esperar para ver los siguientes pasos que dan las administraciones.