Hay un aluvión de noticias alarmantes sobre nuestro ferrocarril. Primero se nos amenazó con trasladar nuestra estación ¡a Moreda! y poco después de nuevo a Huércal, a pesar del efecto demoledor que esta medida tuvo sobre el número de usuarios del tren. La solución a este problema es construir un apeadero en los terrenos propiedad de Adif en el Polígono 20, en los que ha licitado el proyecto de un depósito de materiales para las obras del soterramiento. Ese apeadero podría servir como futura estación Torrecárdenas-Puche en la línea del cercanías (otra de nuestras necesidades ferroviarias desatendidas) y permitiría la llegada del AVE sin que la condicionara el soterramiento, como se ha previsto en Lorca con el apeadero de San Diego.
A continuación se desató la crisis del soterramiento provocada por la Junta, que parece no tener dinero para nosotros porque lo ha comprometido a manos llenas en otras obras y otras ciudades. Esta crisis la desveló la ministra doña Raquel Sánchez en un viaje reciente que hizo para firmar un convenio con la propia Junta sobre el metro 2 de Sevilla, inaugurar la nueva estación de Antequera, y asegurar la buena marcha del Corredor Central que beneficiará a Algeciras y a nuestros competidores marroquíes. También se ha anunciado una nueva línea Málaga-Sevilla que costará 1.200 millones de euros con una importante aportación de la Junta, que Granada aumenta sus servicios con Madrid, que Cartagena construye aceleradamente su conexión al Corredor Mediterráneo, y que en Lorca están muy contentos porque llegará el AVE sin que lo impida su retrasado soterramiento, que lo que sí impedirá es la llegada de la Alta Velocidad a nuestra provincia hasta que esté acabado. Buenas noticias ferroviarias para todos, menos para nosotros, que estamos cada vez más abandonados y agraviados.
La secretaria de Estado Isabel Pardo también ha venido a asegurarnos que la ejecución del tramo Pulpí-Vera va muy bien porque está ya en el 30%, a pesar de que se adjudicó el 31 de enero de 2019 con un plazo de 30 meses, que acabó hace 18. Reconoce que venir a Almería es una odisea, pero no mejora nuestros servicios como hizo en Lugo, su tierra natal, cuando era presidenta de Adif, y como hacen en todas partes sobre todo en fiestas y en vacaciones. El cambiador de ancho lleva 6 años de retraso y no hay material rodante para nosotros, ya que el que hay está en otros sitios. Pese a este panorama desolador mantiene la promesa del 2026, de la que dudó la ministra, pero como ambas no estarán en sus cargos en esa fecha no tendrán que responder de su incumplimiento, como ha pasado con todos sus predecesores.
Seguimos por lo tanto desatendidos, tanto en nuestras necesidades importantes como en las más inmediatas y urgentes. El espectáculo de los políticos culpándose de nuestras desgracias es patético, y carecemos de información fidedigna porque hay una falta total de transparencia: no nos enseñan los proyectos, ni conocemos las cifras reales de plazos, ni la obra certificada y pagada en relación con las cantidades licitadas, ni nos dejan opinar porque no hay canales para hacerlo. Nuestro dinero y nuestra soberanía están usurpados por los partidos.
Una parte importante de la culpa es nuestra por ser incapaces de ponernos de acuerdo. La Mesa del Ferrocarril (que es la más activa y reivindicativa) la Cámara de Comercio, ASAFAL, Califal, la Plataforma para un Tren Público, Social y Sostenible, etc., hacen la guerra por su cuenta. Ahora nuestra alcaldesa quiere montar una nueva mesa “de conectividad” con las administraciones, mientras los ciudadanos viajamos resignadamente en coche o en autobús y los empresarios agrícolas solo pueden recurrir a la contaminación de los camiones.
Es preciso que defendamos juntos nuestros intereses como hacen en otros sitios. Esta tragedia dura ya ¡35 años! que es demasiado tiempo, y afecta gravemente a nuestro bienestar y a nuestra prosperidad actual y futura.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/252411/siguen-empeorando-las-noticias-ferroviarias