Más de cien jóvenes formados en igualdad

El Instituto de Enseñanza Secundaria Alhadra ha formado desde el año 2016 a más de un centenar de técnicos en promoción de igualdad de género a través de un ciclo de FP de grado superior que es pionero en Andalucía y que a día de hoy se ofrece aún en pocas provincias.

El ciclo formativo de grado superior de promoción de igualdad de género pertenece a la familia profesional de servicios socioculturales y a la comunidad y tiene una duración de 2.000 horas repartidas en dos años académicos más las practicas en empresa, porque además tiene la particularidad de que es un ciclo de formación dual, es decir que los alumnos trabajan en empresas desde el primer curso.

La finalidad de este ciclo es formar a los estudiantes para programar, desarrollar y evaluar intervenciones relacionadas con la promoción de la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres, aplicando estrategias y técnicas del ámbito de la intervención social, detectando situaciones de riesgo de discriminación por razón de sexo y potenciando la participación social de las mujeres.

En la actualidad, en el IES Alhadra hay dos grupos de alumnos de este ciclo, uno de primero y otro de segundo, cada uno de ellos con 20 estudiantes (en su mayor parte mujeres), como ha venido ocurriendo desde que se puso en marcha. Esto quiere decir que hasta el momento ha contado con unos 140 alumnos. La inmensa mayoría de los que han obtenido el título de técnico han conseguido un empleo, como explica Irene Rojas, profesora del ciclo, coordinadora dual del IES y de su plan de igualdad.

Empresas Al igual que ocurre de forma generalizada con los cursos de formación dual, el elevado índice de inserción laboral de este ciclo puede tener mucho que ver con que los estudiantes han podido tener un contacto continuo y directo con las administraciones, ONG y empresas que colaboran, como son el Ayuntamiento de Huércal de Almería; Apramp (organización que lucha contra la trata de mujeres y niñas); ‘Mujeres en zonas de conflicto’; La asociación Afim21 (Atención Familia, Infancia y Mayores) dedicada  a atender las necesidades educativas y sociocomunitarias; Médicos del mundo; la asociación Ítaca o la Consultora GM, entre otras.

Junto a esta formación práctica en la empresa, los alumnos del ciclo deben superar igualmente los módulos teóricos, desde Metodología, que les enseñan por ejemplo a realizar un proyecto de prevención de violencia de género, a Programas de desarrollo comunitario en barrio desfavorecidos, o sobre la promoción del empleo femenino. En él se habla de los sectores feminizados y masculinizados, de la segregación vertical, o del techo de cristal que aún impide a muchas mujeres a llegar a puestos de responsabilidad en el mundo de la empresa.

Quienes realizan este ciclo disponen de una formación para continuar luchando en romper esas barreras visibles e invisibles que aún tienen muchas mujeres en su vida diaria y en su trabajo, y para contribuir para que la implicación de la sociedad sea cada vez mayor en este sentido.