Una cartera de Almería pide ayuda a Yolanda Díaz para cuidar a su padre

El sindicato Sipcte ha pedido la mediación de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para hacer posible que Correos traslade a una cartera desde Granada a Almería para que pueda cuidar a su padre, de 86 años y con una dependencia severa reconocida  que, además, sufre en los últimos días una neumonía que necesita de la atención de su cuidadora principal, que no es otra que su hija.

Francisco Sabio, responsable en Almería de Sipcte, ha reclamado a la ministra su intervención en nombre de la cartera, R.R.S., quien pidió por escrito a la Sociedad Estatal Correos su traslado desde Baza, donde tiene su destino actual, a Almería a finales del pasado año, cuando el estado de salud de su padre comenzó a empeorar sensiblemente.

Sin embargo, la trabajadora no obtuvo respuesta de la empresa, por lo que optó por ponerse en contacto con el sindicato, que presentó en enero una demanda de conciliación familiar ante los juzgados de Granada a través del abogado Jorge Ponce, de forma que en menos de dos meses ha conseguido una sentencia favorable del Juzgado de lo Social número 1 de Granada. 

Sabio ha difundido un vídeo en las redes sociales en el que pide a la ministra que se ponga en contacto con el presidente de Correos para reclamarle que cumpla la sentencia. 

“Casi llorando”

Junto a una imagen de la noticia sobre la sentencia publicada por este diario, le explica a Yolanda Díaz que la cartera le ha llamado “casi llorando” estos días, desesperada porque sigue sin noticias, mientras que su padre continúa empeorando.

Sin embargo, cuando han pasado ya ocho días del fallo, Correos sigue sin trasladar a la trabajadora, que se manifiesta desesperada por su situación. De ahí la petición a la ministra. Además, Francisco Sabio también ha dirigido un mensaje a Correos como miembro del Comité de Empresa en Almería, en el que solicita que “de manera inmediata y para no generar más perjuicios a la trabajadora, se den las órdenes a quien proceda, además de la información complementaria del lugar en concreto donde será trasladada, cumpliendo así lo dictaminado en la sentencia”. 

En ella, el juez  Jesús I. Rodríguez, además de considerar “razonable” la petición de la trabajadora, incidía en el hecho de que desde diciembre de 2022, cuando la cartera pidió el traslado, se han celebrado numerosos contratos temporales en Almería y provincia para cobertura de vacantes, a tiempo parcial y a tiempo completo. Y que además existen cinco vacantes en las unidades de reparto 1, 2 y 3 de Almería.

Aunque el fallo del juzgado granadino podía ser recurrido en un plazo de cinco días, Sipcte dice que a fecha de este 17 de marzo, es decir ocho días después, no tiene constancia de que se haya  presentado recurso por parte de Correos. La trabajadora tampoco lo ha hecho, a pesar de que el juez no le ha concedido la indemnización que solicitaba, dándose por satisfecha con la obligación del traslado.

En huelga Ante la precaria salud de su padre, la cartera se está planteando sumarse a la huelga convocada para estos días por el sindicato para poder atenderle.

En la actualidad, el padre se encuentra en su casa de Almería, pero necesita de atención permanente puesto que sufre una neumonía que contrajo “después de coger el covid” cuando estuvo recientemente hospitalizado durante 13 días, según la trabajadora. Desde noviembre, su estado de salud ha empeorado sensiblemente, de forma que ya necesitó también ser hospitalizado durante casi otras dos semanas en enero.

En la actualidad, este hombre, con una dependencia severa de grado II, necesita permanentemente de oxígeno, y es su hija la encargada de ofrecerle toda la atención necesaria como cuidadora principal. 

Falta de humanidad

Al margen de leyes que puedan proteger a esta cartera, e incluso del cumplimiento de una sentencia judicial, el responsable del sindicato Sipcte en Almería, Francisco Sabio, considera que “ante todo, Correos está demostrando una absoluta falta de humanidad en este caso, puesto que estamos hablando de una mujer que solo quiere cuidar a su padre dependiente”.

Sabio no se explica cómo su empresa ha dado lugar a que una trabajadora tenga que recurrir a la Justicia para solicitar algo tan básico como es cuidar a un familiar directo.