Los bazares chinos, en continua expansión: “Ni Hacienda sabe cuántos hay”

"Siempre que paso por delante de alguno, tengo que entrar, porque siempre te hace falta algo en casa y allí es muy difícil no encontrarlo. Un jarrón, una maceta, guantes de látex... lo que sea. Y además suele ser más barato que en otros comercios". Quien habla es Toñi, instantes antes de acceder al Bazar Asia, en la avenida de Monserrat de la capital almeriense. Allí entra después de pasar por la consulta de su médico de cabecera en el centro situado justo enfrente.

Este bazar es uno de los tantos comercios puestos en marcha por ciudadanos de origen chino en la provincia y una de los más de 30.000 tiendas regentadas tanto por chinos (unas 18.000) como paquistaníes (12.000) que se calculan que existen en España, una estimación efectuada en Linkedin hace algunos meses por Laureano Turienzo, presidente de la Asociación Española de Retail.

Estos bazares, en continua expansión en la provincia, se caracterizan por tratarse de grandes superficies, que en algunos casos superan los 5.000 metros cuadrados, en los que uno puede entrar y perderse entre los interminables pasillos, que en ocasiones se abren sobre otros, repletos de productos de todo tipo: desde juguetes a decoración del hogar pasando por útiles de jardinería, celebraciones, pequeños electrodomésticos e incluso accesorios para nuestro vehículo.

En Viator se encuentra el que probablemente sea el bazar chino más grande de la provincia de Almería y que seguramente es uno también de los de mayor tamaño de toda España, al que llegan clientes incluso desde pueblos del Levante Almeriense como Mojácar. Es el Comercial Dragón, una nave de más de 5.500 metros cuadrados que se ubica en el Polígono Industrial de La Juaida, a muy pocos metros del enlace de la A-7 con la A-92. Ya en su inmensa fachada informa de lo que puedes encontrar dentro: bolsos, regalos, ropa, ferretería y hogar, así como de su pertenencia a la Asociación de Bazares Chinos de España. Casi una decena de largos pasillos, abriéndose desde el central una puerta a una segunda nave con una docena más.

Al frente del 'Dragón' está 'Luis', nombre español adoptado por el propietario del establecimiento, de origen chino. "Así me conocen todos aquí y me gusta", explica. ¿Qué es lo que más buscan los clientes? Ya en esta época del año, accesorios para el verano, como colchonetas, bolsas de playa o chanclas. "Las cosas de hogar se venden todo el año, pero durante el resto del año las cosas van cambiando en función de la época", añade. Algunos de los productos de decoración son exclusivos de esta tienda. Los fabrican en Portugal y son los únicos de la provincia en venderlos o distribuirlos: proveen incluso a grandes superficies como Carrefour o Alcampo. "Les ponen sus marcas, pero la fábrica es la misma".  

Con un tamaño total algo inferior, en torno a los 4.500 metros cuadrados contando la zona de aparcamiento, en Cortijo Grande en la capital abre sus puertas Maxi Shop. A pesar de tener más amplitud y luz, de sus pasillos van apareciendo otros nuevos, dándole cierto toque laberíntico. "La gente viene a buscar sobre todo productos para la casa, como almacenaje y otras cosas de hogar", comenta Anjie, propietario de este negocio, cerca del cual conviven otros dos bazares de menor tamaño, en una clara muestra de la expansión de este tipo de negocio.

"Es muy difícil saber los datos reales de cuántos establecimientos chinos hay en España y posiblemente no lo sepamos nunca, ni lo van a decir. Muchas tiendas abren, cierran, cambian de sitio... No lo sabe ni Hacienda", reconocen desde una asociación de amistad con China con sede en Madrid consultada por LA VOZ. Lo que sí es evidente es el notable aumento de estas grandes superficies convertidas prácticamente en centros comerciales donde, como contaba Toñi o reflejan las miles de personas que las visitan a diario para comprar, es prácticamente imposible no encontrar aquello que buscas.