Almería tiene un 11% más de alumnos con TEA que hace un año

Almería cuenta con 313 alumnos con trastorno del espectro autista repartidos en 64 aulas TEA por toda la provincia. Una media de casi 5 alumnos por cada una de estas aulas, datos que han supuesto en este curso académico 2022/23 un incremento del 11% con respecto a los registros del curso anterior, cuando se contabilizaron 282 alumnos con TEA, repartidos entonces en 59 aulas, cinco menos que ahora.

Según los datos aportados por la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía, la previsión es que estos datos continúen en crecimiento durante los próximos años académicos, al mismo tiempo que se espera poder aumentar las unidades en diferentes municipios de la provincia. 

El alumnado con trastorno del espectro del autismo (TEA) es el más numeroso del total del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo asociado a discapacidad en toda España, representando el 28,1% del total (69.002 alumnos en todo el territorio nacional en el curso 2021/2022), seguido del alumnado con discapacidad intelectual (26,9%) y con trastornos graves de la conducta (21,7%).

Según estos datos, reflejados en el informe ‘Datos de alumnado general no universitario con trastorno del espectro del autismo’ realizado por Autismo España a partir de los datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional relativos al alumnado escolarizado en Régimen General correspondiente al curso 2021/22, en la actualidad 69.002 alumnos con autismo (57.104 niños y 8.898 niñas) cursan las enseñanzas no universitarias establecidas en el sistema educativo español, un 0,84% del total del alumnado que cursa enseñanzas de régimen general.

El aumento producido en Almería es similar al que se da en España, donde en el último curso, el número de estudiantes con autismo ha aumentado un 14,63% (8.804 personas) observándose, por primera vez, un incremento porcentual más elevado de niñas (21,09%) que de niños (13,36%). Desde el curso 2011/12, el estudio destaca que el alumnado con TEA ha experimentado un incremento total del 262%.

“Hay un aumento sí, pero hay que ponerlo en contexto”, explica Charo Medialdea, presidenta de Dárata, una de las asociaciones de autismo existentes en la provincia de Almería. “Principalmente es debido a que hay un diagnóstico temprano que antes no había”, en lo que influye también que “antes apenas había guarderías y ahora es raro el niño que no pasa por una, y allí hay profesionales que cuando ven señales de alerta, de momento hablan con la familia y hay pediatras por medio”, comenta.

También “hay trastornos que ya había y a los que hoy se les ha puesto nombre”, explica, además de otros factores como que “la población está cambiando sus hábitos en alimentación, las familias tenemos mucho estrés, el tener hijos a edades más tardías o los partos prematuros, todo eso afecta al posterior desarrollo del niño”, añade.

Algo en lo que coincide Javier Martínez, directivo de ALTEA, otra de las asociaciones de autismo en la provincia. “Los estudios científicos nos hablan de causas genéticas, pero las causas de que haya un aumento son multifactoriales y creemos que están asociadas al tipo de vida que llevamos en la sociedad occidental, los tratamientos hormonales, la edad a la que se tienen los hijos, la alimentación es peor… No hay nada demostrado científicamente, pero se piensa que afecta”.

"Escasa formación"

A pesar de esta tendencia al alza del alumnado con TEA en la educación obligatoria, desde Autismo España se ha advertido de que el profesorado “carece de formación específica en autismo”.

Ello se debe, explica Charo Medialdea, presidenta de Dárata, a que “la propia enseñanza universitaria no tiene créditos o asignaturas específicas para la discapacidad, los futuros profesionales tienen materias muy generalistas pero luego se encuentran con una comunidad con necesidades educativas para las que no tienen la formación necesaria”.

“Se está intentando, pero ahora mismo dependemos más de la buena voluntad de los profesionales que se quieren formando por su cuenta día a día”, añade.

Javier Martínez (ALTEA), por su parte, indica que “en mi caso, tengo un hijo en un aula TEA donde el profesor sí tiene mayor formación específica, pero mi otro hijo está en una modalidad B, una clase ordinaria con apoyo, donde no saben cómo llevarlo y tienen que pedir consejo al orientador o recurrir a profesionales privados”. 

Aulas TEA 

Pese al aumento anual de aulas TEA, Martínez considera que siguen siendo insuficientes, “porque siempre hay niños que se quedan, en la matriculación se hace un dictamen de escolarización que indica el tipo de modalidad que le puede llevar a un aula TEA o a un aula ordinaria con apoyos, pero siempre hay más solicitudes que aulas”.

Para Martínez, “en los profesores de clases ordinarias, el conocimiento es casi nulo, esa formación no ha llegado pero tampoco se les incentiva; los profesores de aulas TEA tienen formación continuada, quedan plazas libres pero no hay profesores que suban a esas formaciones”.

Almería capital lidera el número de aulas TEA en la provincia, con 23, dos en los CEIP Europa-José Ramos Santander y Lope de Vega y CDPEE Atención Autismo Almería y una en los CEIP Colonia Araceli, Francisco de Goya, Ginés Morata, Indalo, Juan Ramón Jiménez, Los Millares, Luis Siret, Mar Mediterráneo, Nueva Almería, San Luis, Santa Isabel, Virgen del Loreto, San Bernardo (El Alquián) y Torremar (Retamar-El Toyo), así como en los IES Alhadra, Cruz de Caravaca y Nicolás Salmerón.

Roquetas de Mar cuenta con 16, ocho de ellas en Aguadulce (dos en los CEIP Blas Infante y Virgilio Valdivia y uno en los CEIP Arco Iris, Francisco Sáiz Sanz y Trinidad Martínez e IES Mar Mediterráneo), seis en Roquetas (dos en los CEIP Las Salinas y Posidonia y uno en el CEIP La Molina e IES Turaniana) y dos en Las Marinas (CEIP Gabriel Cara y Las Marinas). El Ejido tiene 9, seis en el núcleo urbano (dos en el CEIP Diego Velázquez y una en los CEIP Laimún, Loma de Santo Domingo, Teresa de Jesús y Tierno Galván), dos en Almerimar (CEIP Almerimar) y una en Balerma (CEIP Miguel Servet).

Tres tienen en Níjar (CEIP Concordia en Campohermoso, La Atalaya en Níjar y Juan Sebastián Elcano en San Isidro) y en Vícar (dos en el CEIP José Saramago y uno en el CEIP Virgen de la Paz en la Puebla de Vícar), dos en Vera (ambas en el CEIP Reyes Católicos) y uno en Adra (CEIP Mare Nostrum), Albox (CEIP Velázquez), Alhama de Almería (CEIP Inmaculada Concepción), Berja (CEIP San Tesifón), Cuevas del Almanzora (CEIP Álvarez de Sotomayor), Garrucha (CEIP Ex Mari Orta), Huércal-Overa (CEIP Virgen del Río) y Turre (CEIP María Cacho Castrillo).