Almería y Carboneras, entre las mayores zonas contaminantes por carga portuaria

La contaminación del aire ha repuntado en la provincia de Almería durante el pasado año 2022 motivado sobre todo por el efecto del cambio climático y el aumento del tráfico. 

El informe elaborado por Ecologistas en Acción analiza los datos recogidos en 780 estaciones oficiales de medición instaladas en todo el Estado español, entre ellas 106 situadas en Andalucía y 10 en Almería: El Boticario, Avenida del Mediterráneo, Puerto de Almería, Puerto de Carboneras, Níjar, El Ejido, Bédar, Palomares, Villaricos y Mojácar.  Entre sus principales conclusiones, destacan que durante 2022 la calidad del aire en Almería ha empeorado respecto a los años 2020 y 2021, con un aumento de los niveles de partículas respirables (PM10) y más matizado de partículas finas (PM2,5), dióxido de nitrógeno (NO2) y ozono troposférico, aunque sin alcanzar las concentraciones habituales en años anteriores a la pandemia. 

Un problema específico es la repercusión del tráfico marítimo en el Puerto de Carboneras por el movimiento y el almacenamiento al aire libre de graneles sólidos como el yeso. La Estación de Níjar superó también los límites vigentes, según el umbral de alerta establecido por el Gobierno Español. La clausura de la Central Térmica de Carboneras ha contribuido, no obstante, a reducir las emisiones contaminantes desde 2021. La Estación de Bédar, curiosamente registró mala calidad del aire en más de cien días, aunque, a priori, es uno de los entornos serranos en plena naturaleza del Levante almeriense, mostrando persistencia de contaminación entre abril y septiembre de 60 microgramos por metros cúbico, según la guía de la Organización Mundial de la Salud.

Según el informe, merece la pena reseñar los elevados niveles de partículas totales detectados en el Puerto de Almería y en el de Carboneras que pueden conllevar una repercusión severa sobre la calidad del aire en las áreas residenciales cercanas a ambas localidades. Curiosamente, queda fuera de esta medición el Puerto de Garrucha, que en el niveles de carga de graneles sólidos -yeso- duplica la actividad de Almería y Carboneras juntas, con 8,2 millones de toneladas anuales de carga a cielo abierto enfrente del núcleo de población, establecimientos turísticos y playas. Probablemente su no inclusión sea debido a que es un Puerto de titularidad autonómica, no estatal, aunque los informe de contaminación, en principio, no deberían entender de este tipo de separación, porque la contaminación no entiende de fronteras.  Carboneras es uno de los nueve principales focos de contaminación en Almería debido a su actividad industrial y portuaria, aunque ha mejorado sus mediciones a raíz del cese de actividad de la Térmica.