En Almería no tenemos ríos por los que veamos correr el agua, es una provincia con un déficit hídrico y donde el agua se obtiene bien en pozos subterráneos o por procesos de desalinización.
El agua es potable en casi todos los municipios de la provincia, aunque todavía hay zonas que la cantidad de sales y cal supera hasta en 4 veces lo considerado aconsejable para el consumo. Las aguas que se obtienen de los pozos se han filtrado por un terreno hasta llegar al acuífero y en todo ese proceso han ido disolviendo distintos tipos de sales. Según el terreno o las lluvias que hayamos tenido pueden tener una importante concentración de sales y para su consumo, al igual que a las aguas desaladas se les añade cloro sometiéndose a un proceso de cloración.
El cloro es un producto químico, pero es el proceso para la potabilización del agua que llega a nuestros hogares. Ahora bien, una cosa es que sea potable y otra muy distinta es que sea saludable. La OMS nos dice que hasta un cierto índice de cloro no es perjudicial para nuestra salud pero, ¿Por qué beber un producto químico si podemos evitarlo? Además del cloro, que es el causante del mal sabor, el agua de la red viene con sedimentos que también son perjudiciales para nuestro organismo, como los metales pesados, nitratos, herbicidas y pesticidas, trialometanos (como el arsénico) etc…
Ese sabor que todos conocemos e identificamos en seguida del agua del grifo, es lo que nos hace ir todas las semanas al supermercado y acarrear con las botellas o garrafas de plástico. Pero desde que las autoridades han empezado con su concienciación a los plásticos que nos parece perfecto, han empezado aparece cada vez más estudios sobre la seguridad de beber agua en botellas de plástico. Estas botellas están elaboradas con un compuesto denominado teraflelato de polielileno, un polímero que al exponerse a fuentes de calor desprenden micro plásticos que luego nos bebemos, se calcula que si bebemos agua embotellada podemos llegar a bebernos el equivalente a una tarjeta de crédito en 3 meses. Además, hay estudios que dicen que se recicla solo el 10 % de las botellas que se fabrican.
¿Cómo podemos beber agua de una forma saludable? Pues parece ser que todo apunta a que la mejor solución la tenemos en el grifo de casa. Y para que nos de soluciones hemos contactado con una empresa especialista en el tratamiento del agua, Hidroindal, su gerente Marcelo Valente lleva más de 20 años en Almería, primero trabajando como fontanero pero luego especializándose en el tratamiento del agua, sobre todo y es lo primero que nos destaca, por su mentalidad ecologista. Su preocupación por la escases de recursos y el problema que tenemos en España por la falta de agua le hace investigar y buscar soluciones, así puede montar sistemas que te permite que no se desperdicie el agua cuando abrimos el grifo y esperamos a que esta salga caliente o montando equipos de limpieza ecológicos que lava la ropa sin necesidad de detergentes, solo con el mismo agua enriquecida en oxigeno.
Marcelo nos cuenta que “principalmente por lo que no bebemos el agua del grifo en toda la provincia es por su sabor, una solución que se rentabiliza muy rápido es la de montar un equipo de osmosis inversa, pero se venden equipos de 5 etapas que NO cumplen la normativa y pueden llegar a tirar más de 10 veces el agua que producen, además de contar con un deposito que si no se realiza un mantenimiento adecuado puede llegar a contaminarse, sobre todo, cuando los cambios de filtros los hacen personas que no están cualificadas para ello. Teniendo en cuenta que el agua de una ósmosis se utiliza para consumo humano, su mantenimiento debería ser realizado por un profesional”.
Marcelo por medio de su empresa Hidroindal está montando equipos que no necesitan estos depósitos para almacenar el agua además de desperdiciar una cantidad mínima de agua, la diferencia de unos a otros se aprecia solo con ver la membrana que utilizan además de conseguirse un agua con un sabor mucho más “puro”.
Y destaca la importancia del mantenimiento. “Sea la máquina que sea es fundamental su mantenimiento y en muchas ocasiones cuando nos llaman y llegamos nos encontramos con maquinas que llevan años sin cambiar filtros y con un pésimo mantenimiento, al punto que es preferible beber cualquier agua potable, que la que sale por esa máquina. Estás máquinas requieren de un mantenimiento y es muy importante que se cuiden”
En la provincia de Almería, donde el agua es escasa y a menudo de baja calidad, tener una osmosis inversa en casa puede ser una gran ayuda no solo para el suministro de agua potable, sino también para ahorrar dinero y proteger la salud de su hogar.
La ósmosis inversa es un proceso en el que el agua se filtra a través de una membrana semipermeable para eliminar minerales, sales y otros contaminantes. Este proceso tiene muchos beneficios, especialmente en áreas como Almería donde el agua del grifo puede ser demasiado dura o contener impurezas.
La primera ventaja de tener una ósmosis inversa es que mejora la calidad del agua que bebe su familia. Al eliminar el cloro, el fluoruro y otros productos químicos, el agua filtrada es más segura y saludable para beber y cocinar. Además, el agua filtrada a través de una osmosis inversa es más pura y fresca, lo que significa que tiene un mejor sabor.
Al tener una ósmosis inversa, también puede ahorrar dinero a largo plazo en la compra de botellas de agua envasada. Además, el agua fresca y filtrada también significa que su cafetera, plancha y otros electrodomésticos no se acumularán con minerales que pueden dañarlos y acortar su vida útil.
Es importante destacar que la instalación de una osmosis inversa en casa no solo mejora la calidad del agua y el ahorro de dinero en botellas de agua, sino que también tiene beneficios ambientales. Al reducir el consumo de botellas de plástico, está contribuyendo a la protección del medio ambiente.
En resumen, tener una ósmosis inversa en casa es una inversión útil y necesaria para cualquier hogar en la provincia de Almería donde el agua puede ser escasa o de baja calidad. No solo mejora la calidad del agua para su familia, sino que también contribuye a ahorrar dinero y proteger el medio ambiente a largo plazo.
Almería es una de las zonas de España que tiene la peor agua y hoy en día, todos utilizamos alguna alternativa al agua del grifo para beber. Ya sea el agua embotellada, como también pueden ser los sistemas de dispensadores con botellones de agua.
Un sistema de ósmosis es la alternativa mejor para ello, por SALUD, COMODIDAD, ECONOMÍA Y ECOLOGÍA. No es la solución que nos gustaría tener, pero vivimos en Almería y de momento es una solución que cada vez se impone en más hogares para poder beber el agua del grifo.
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