Autobús y limpieza: se busca nuevas empresas y mejoras del servicio

El transporte público y la limpieza de la ciudad son, sin lugar a dudas, dos de los de los temas que siempre aparecen en los primeros puestos de las encuestas sobre preocupaciones que tienen los almerienses. Sobre el primero siempre se critican los tiempos, la necesidad de incrementar frecuencias con los barrios periféricos o los problemas para poder combinar las líneas. En la limpieza la opinión en la calle es general: Almería está sucia. Al menos mucho más sucia de lo que sus vecinos quieren y de lo que parecen estar otras ciudades de su entorno con el mismo tamaño y clima.

Estos dos problemas que sin duda marcan desde hace tiempo la gestión municipal tienen a lo largo del curso político que arranca este mes de septiembre la posibilidad de buscar una mejora por parte del equipo de Gobierno. Y es que toca volver a sacar el contrato de concesión administrativa de ambos servicios públicos - porque la fórmula de prestación de forma directa no se plantea por parte de los mandatarios municipales- y para ello, se tienen que elaborar los correspondientes pliegos de condiciones que marcarán las condiciones en las que deberán prestarse.

Cierto es el principal problema para todos, por unanimidad, es la limpieza. Muy consciente del problema es la propia alcaldesa de la ciudad, María del Mar Vázquez, que confía en que se puedan encontrar soluciones con el nuevo contrato. Explicaba la regidora de la capital en declaraciones a La Voz de Almería que “se está trabajando ya en el pliego de condiciones para el nuevo contrato. Es lo que llevo diciendo desde hace mucho tiempo, que este contrato es de hace 10 años y que las máquinas ya están amortizadas”. En este tiempo la ciudad ha seguido creciendo y la maquinaria ha envejecido generando en muchos casos unos ruidos que son inasumibles para los vecinos que se ven afectados. 

Dentro de las labores para la preparación de este pliego que tiene que salir del área que dirige Antonio Urdiales, la Concejalía de Sostenibilidad Medioambiental y Energética, se han realizado ya algunas pruebas para conocer la maquinaria más moderna para prestar el servicio. Así explicaba la alcaldesa que han probado en la Plaza Vieja “máquinas barredoras, máquinas de recuperación de pavimento, y se ha visto la prueba de cómo se quedaba el suelo antes de pasar y después de pasar”. Además, en ese nuevo material tecnológico aplicado a la limpieza también se sondea la adquisición de maquinaria que “además de echar el agua para limpiar, luego la aspira para no ir dejando charco” solventado otros de los problemas que generan. 

Explicaba Vázquez también que “el concejal también va a visitar sitios diferentes para ver las fórmulas para que la limpieza salga bien”. Y es que lo cierto es que en los últimos años la situación de falta de limpieza y críticas por parte de los ciudadanos es algo que se ha ido agravando e instalando a pesar de que se haya ido incrementando el presupuesto que se ha destinado a este fin año tras año. Creen en el equipo de Gobierno que con un nuevo contrato y con la concienciación ciudadana, se podría cambiar el camino tomado. Ahora queda que sea así.

Movilidad

En cuanto al transporte público de la capital almeriense es mucho lo que está por avanzar teniendo en cuenta que, a pesar de la prórroga y actualización que se realizó en el año 2018, la concesión administrativa que presta ALSA a través de Surbús data del año 1998 con todos los cambios que se han producido en la ciudad y la forma de moverse de los almerienses desde entonces. Y claro, es que en materia de movilidad la ciudad se ha quedado atrás hasta en su Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) aprobado en el año 2015. 

Ante esta situación, y contando por parte del equipo de Gobierno municipal con que no hay personal suficiente en el área de Movilidad, se ha decidido proceder a la contratación de una consultora que se encargue de la actualización del PMUS y, a partir de esto, analizar las principales carencias y necesidades existentes en el servicio del transporte público y elaborar así el pliego de condiciones.

Ciertamente serán las claves que formule esta consultora las que marquen el documento para la contratación, si bien la alcaldesa de la ciudad tiene claros algunos elementos que hay que mejorar: las conexiones con los barrios de Levante y con Castell del Rey.

“Hay que incluir zonas muy alejadas, como es el caso de Cabo de Gata”, afirmaba María del Mar Vázquez, algo que sería toda una novedad porque el servicio actualmente se presta por parte del Consorcio Metropolitano de Transportes. Considera la regidora que también debería apostar este nuevo contrato por aumentar frecuencias con zonas que actualmente cuentan con menos servicios y pone como ejemplo “Castell del Rey, que aunque se ha habilitado un microbús tiene la demanda y está creciendo en población para que le demos servicios y desde luego que hay que cubrirlo. Entiendo que hay que mejorar las conexiones sobre todo con los barrios de Levante que son zonas que se van llenando de niños, de población, de estudiantes y que necesitan estar conectados. Tenemos un hospital cada vez más moderno, con mayor capacidad y es uno de los espacios con más tránsito”. 

Con estas prioridades marcadas y con lo que diga la consultora se deberá establecer un pliego de condiciones en el que posiblemente se deba hablar de elementos que llevan sobre la mesa del área de Movilidad desde hace años como los intercambiadores en diferentes zonas de la ciudad, algo que permitiría hacer líneas más cortas y apostar por los trasbordos como algo normal, lo que obliga también a un cumplimiento mayor de los horarios y del funcionamiento de la aplicación que da información a los usuarios. Aunque ciertamente todo está aún por ver.