“A todo el mundo se le cae la baba cuando habla del Cabo de Gata”

José Yélamo, periodista y presentador de La Sexta _Explica, hijo de periodista, debutó en televisión delante de una cámara en Almería. Hace ya 18 años. Esta semana ha recibido en la capital uno de los premios de La Razón y ha concedido esta entrevista a este periódico.

Ha llegado esta tarde en avión a Almería. Imposible hasta el año 2026, por lo menos, venir en un tren AVE.
Tampoco hay AVE en mi tierra, en Cádiz. Nos dijeron que lo íbamos a tener hace 20 años y todavía lo estamos esperando.

Pero Cádiz está a una hora de Sevilla, donde se puede coger un AVE hacia Madrid.
El problema es que de Sevilla a Cádiz se tarda lo mismo que de Sevilla a Madrid.

En algo nos parecemos.
Almería es una potencia turística en España y tiene un movimiento económico importantísimo en el sector primario. Es una pena que no tenga mejores conexiones con Madrid y unas infraestructuras necesarias tanto aquí como en otras partes de Andalucía.

¿Hay dos Andalucías entonces?
Hay una Andalucía de dos marchas. Hay una liderada por Málaga y Sevilla y otra en la que estamos intentando subirnos al tren de las infraestructuras. Aún así, Andalucía ha cambiado mucho para bien en los últimos 20 años a nivel de conexiones ferroviarias y de autovías. Todavía se puede hacer mucho más.

Y ahora que reside en Madrid, ¿cómo se ve Almería desde la capital del Reino?
Se os ve como una tierra muy trabajadora. La gente se sorprende cuando conoce el potencial económico de Almería y cuando sabe que la fruta y verdura que consume a diario procede de esta provincia. Lo mismo le pasa a ingleses, alemanes o franceses.

Puede decirse que Almería es una gran desconocida …
La potencia del sector agrícola habla muy bien de su capacidad de trabajo y del emprendimiento empresarial que hay en Almería. Todo el sector agrícola está muy tecnificado y cumple los estándares de calidad. Yo creo que eso es una marca propia de esta tierra de la que os podéis sentir muy orgullosos.

Y junto a ello está el aspecto turístico. A todo el mundo se le cae la baba cuando habla del Cabo de Gata, que da un toque especial y exótico a la provincia y tanto gusta a los que vivimos en Madrid, donde casi nadie es de Madrid, …

¿Qué recuerda de Almería?
El primer contacto que tengo con la tele fue precisamente en Almería en el verano de 2005 cuando hubo una huelga de basura en la ciudad. Recuerdo mi primera entradilla ante una cámara delante de un contenedor. Antes había trabajado en prensa escrita en el Diario de Cádiz y El Correo de Andalucía.

De eso hace ya 18 años.
Exactamente. Luego he venido muchas otras veces, tanto profesionalmente como por ocio.

Se puede decir que ha alcanzado la mayoría de edad en televisión. ¿Lo mejor es la fama que ya tiene como presentador?
He tenido la posibilidad de asomarme a infinidad de realidades distintas. Esa es la gran virtud que tiene mi profesión, el periodismo, y lo que me apasiona realmente.

¿Realidades que necesitan ser explicadas desde diferentes ópticas por los explicadores que aparecen en su programa, que se llama precisamente Xplica?
Hay condicionantes. La televisión te exige mucha inmediatez y está muy tiranizada por las audiencias. Tratamos de explicar cosas que preocupan a la gente y de y combinarlo con el puro y duro debate político que en los últimos meses está siendo bastante intenso. Nuestro objetivo es que todo espectador se sienta representado y dar una visión lo más plural posible, y sobre todo lo más honesta posible.

¿Suele entrar en las redes sociales cuando acaba el programa ya de madrugada?
La verdad que no. Antes me afectaba mucho. Incluso buscaba yo a ver qué decía la gente de mí. Ya sé lo que va a pasar: los de un bando van a decir que soy comunista y los del otro bando que soy un fascista. Si eso pasa es que algo estaré haciendo bien. Prefiero ahorrármelo y lo que sí busco es la reacción de quienes me rodean, de mis
referentes periodísticos o el entorno profesional y familiar.

En su programa se habla lo mismo del precio de los tomates de Almería que de la próxima sesión de investidura de Pedro Sánchez.
A mí me apasiona la política, pero poder complementarla con ese aspecto más social más pegado a la calle, también saca esa parte de mí más espontánea y más natural, con la cual también me siento muy identificado. Por tanto, ¿a quién quiero más, a papá o a mamá? No sé, disfruto de las dos cosas.

Hablando de política. Resolvamos una duda. ¿Seguirá Pedro Sánchez de presidente tras la próxima sesión de investidura?
A día de hoy, 17 de octubre, creo que se le está complicando bastante, pero bueno… Vamos a ver qué pasa. Nunca se sabe. Esto es hoy. Recalca la fecha porque en política todo cambia en 24 horas y pueden pasar muchas cosas. Queda más de un mes. De aquí al 27 de noviembre vamos a ver muchos giros de guion.

¿Dependemos de lo que se decida en Waterloo, donde está Carles Puigdemont?
Realmente sí. Dependemos, en definitiva, de las expectativas que genere Junts en su electorado. Junts ha tenido durante estos años un discurso muy beligerante, encendido y rotundo en cuanto a los objetivos que persigue: independencia, referéndum y autodeterminación. En manos de ellos está y en manos de la capacidad que tengan de bajar ese discurso tan inflamado que han ido abanderando durante todos estos años y que es difícil bajar al suelo en las semanas que quedan hasta la investidura.

Un futurible. Pedro Sánchez se sienta este sábado en el plató de Xplica en La Sexta. ¿Cuál sería su pregunta del millón?
¿Se arrepiente de no haber apostado desde el principio por la repetición electoral? Esa sería la pregunta que formularía hoy, aunque se puede quedar antigua en cuestión de días.

Y en el caso de Alberto Núñez Feijóo, ¿le perjudicó el pasado 23 de julio la estrategia de pactos autonómicos con Vox?
Sin duda. El Partido Popular y el perfil de Feijóo, teóricamente moderado, se han visto muy afectados, dañados y tocados por los pactos con Vox. Vox no solo es una ultraderecha al uso como hay en otros países europeos, sino que es una ultraderecha bastante escorada a la derecha. Es una ultraderecha muy ultraderecha.

Y en Andalucía, el presidente popular Juanma Moreno le paró los pies a Vox en las urnas en las últimas autonómicas.
Podemos estar orgullosos en Andalucía de que aquí Vox no está dentro del gobierno. Y también tengo la sensación de que Vox, en general, no solo en Andalucía, está en un momento delicado. Ha perdido algunas de sus cabezas más visibles, hay una crisis interna importante y, además, hay poderes fácticos en las élites empresariales y económicas en este país que saben que mientras esté Vox en la ecuación, el Partido Popular va a tener difícil gobernar. El PP necesita la reunificación de la derecha que consiguió José María Aznar.

Cambio de acera política ¿Ya no disimulan el divorcio Pablo Iglesias y Yolanda Díaz?
Sobre todo Pablo Iglesias desde hace mucho tiempo.

Y fue Pablo Iglesias quien la designó, digamos a dedo, como su sucesora.
Son las paradojas de la política. Pablo Iglesias está continuamente cuestionando a Yolanda Díaz. Yo creo que Yolanda Díaz tiene un reto muy complicado por delante. Sumar es un paraguas que engloba muchos partidos diferentes, con muchas sensibilidades, y uno de esos partidos es Podemos. Su dirigente, Ione Belarra, y su dirigente en la sombra, Pablo Iglesias, se están mostrando muy agresivos con las políticas de Yolanda Díaz.

¿No va a seguir de ministra Irene Montero?
Yo diría que no, pero, insisto, la política cambia mucho en 24 horas.