La Plataforma Toxicidad Puerto de Almería ha superado ya los 700 inscritos y sigue creciendo. Su afán es acabar con los episodios de contaminación que se registran en la zona portuaria de la capital, tanto por la emisión de partículas de polvo como por los humos de los barcos o el ruido de los generadores eléctricos.
La última de sus acciones fue la presentación de denuncias ante el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, que decidió aceptar esa demanda e iniciar la tramitación de la queja presentada. La primera consecuencia ha sido la apertura de expediente de investigación tanto a la Autoridad Portuaria como a la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul en Almería.
Un expediente que tendrá como principal objetivo obtener información en torno a las actividades de carga de graneles sólidos que se realizan actualmente en el muelle de Poniente y Muelle de Pechina, actividades que derivarían en problemas de Salud Pública y contaminación medioambiental, a causa de las emisiones de polvo, humos y ruidos que afectan desde hace años a los vecinos de los barrios próximos al puerto.
Los representantes de la Plataforma de afectados explican que esta organización está formada por vecinos y empleados de centros de trabajo situados en barrios como los de Pescadería, La Chanca, Centro Histórico, La Almedina, Nicolás Salmerón y Oliveros.
Según su portavoz, Jorge López Zea, varios de los residentes en estas áreas son personas vulnerables, entre ellos menores, alumnos de centros escolares, ancianos, enfermos con patologías respiratorias o personas hospitalizadas, todas ellas con riesgo potencial de padecer enfermedades como cáncer, silicosis, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfisema, bronquitis o asma, entre otras muchas.
Algunos datos
De los más de 700 almerienses que se han integrado en la Plataforma alrededor de un centenar son personas que sufren alguna de esas enfermedades, las cuales están planteando la posibilidad de presentar una demanda ante los responsables de esas emisiones y reclamar indemnizaciones.
Los resultados de las primeras gestiones realizadas por la oficina del Defensor del Pueblo señalan que en los últimos dos años se han impuesto dos sanciones de 30.000 y 18.000 euros a dos operadores del puerto de Almería por las emisiones en las operaciones de carga de graneles sólidos, sanciones en las que han intervenido la Delegación de Medio Ambiente de la Junta y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA).
La Plataforma echa de menos la aportación de datos sobre la superación de los valores permitidos de emisiones, o sobre las operaciones de carga que se realizan en presencia de vientos de poniente o levante, momentos en los que, en teoría, no estarían permitidas esas operaciones.
Parar la carga
Aunque los grandes tráficos de graneles se trasladaron hace varios años al Muelle de Poniente y al nuevo Muelle de Pechina, la distancia con las viviendas sigue haciendo necesario cumplir con la norma que debería paralizar esas maniobras de carga en días de viento, porque arrastra las partículas tóxicas hacia los barrios más próximos.
Desde la Plataforma advierten que seguirán trabajando para conseguir que se resuelvan los problemas existentes, por un lado informando a los ciudadanos de las consecuencias de esta contaminación, denunciando las emisiones en el momento en que se produzcan, criticando la inacción de autoridades como el Ayuntamiento y buscando nuevos adeptos para su causa.
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