La Junta se abre a la tasa turística pero la capital se mantiene en su “no”

Moreno insta al consejero de Turismo a reunir a la FAMP y empresarios para llegar a acuerdo

Comparecencia del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno
Comparecencia del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Europa Press
Lola González
22:17 • 14 mar. 2024

¿Tendrá Almería tasa turística? Todo está por ver después de que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, abriera este jueves la puerta a negociar su implantación en la comunidad autónoma.



Anunciaba Moreno en un desayuno informativo que ha instado al consejero de Turismo, Arturo Bernal, a promover una reunión entre la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) y la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) en la que la Junta actuaría como “mediador” para “impulsar” que ambas partes logren un acuerdo para regular la tasa turística.



Tiene claro el presidente de la Junta que el objetivo es que “se sienten y entre ellos negocien un acuerdo o una posibilidad de acuerdo para esa tasa turística que están demandando unos ayuntamientos con limitaciones muy concretas y específicas y que el sector no termina de ver”.



Hay que tener en cuenta que esta apertura a negociar la posible implantación de la tasa turística llega después de que el presidente de la Federación Andaluza de Municipios Provincias y alcalde de Córdoba, José María Bellido, pidiera crear un grupo de trabajo para crear esa tasa que también piden alcaldes de ciudades como Sevilla, Granada, Cádiz o Málaga.



Dudas
En el caso de Almería la cosa parecía estar totalmente clara hace apenas 10 días, justo cuando el pleno del Ayuntamiento tumbó la moción presentada por el Grupo Municipal de Podemos-IU-Los Verdes en la que se reclamaba. Ningún otro partido respaldó la petición.



Parece que la posición se mantiene. Dice el concejal de Turismo, Joaquín Pérez de la Blanca, que “adoptar la tasa turística no es una prioridad en estos momentos, ya que Almería no presenta un problema de masificación turística. Y es conveniente el ir observando cómo resulta su implantación en aquellas ciudades que sí la tienen antes de adoptar una decisión definitiva en este sentido. Y por supuesto va a contar siempre con un diálogo permanente con el sector turístico”.  



Esto parece que cierra la puerta a una petición municipal para la implantación de la tasa, pero se desconocen los términos de la negociación que podría abrirse a partir de ahora. Habría que analizar si, en caso de ser aprobada, sería de obligada implantación en toda la comunidad o si solamente se pondría en marcha en los municipios en los que se solicitase. Todo ahora mismo serían meras conjeturas.



Negativa
Los que lo tienen claro son los representantes del sector hostelero: no quieren tasa alguna.


En el caso concreto de Almería, Pedro Sánchez-Fortún, presidente de Ashal, tiene claro que “dentro del sector está generalizado un posicionamiento en contra de esta tasa turística. En Almería no tenemos un problema hoy en día de una fluencia masiva de visitantes” por lo que no entienden la necesidad.


Cierto es que es la misma postura que mantiene el Consejo Empresarial de Turismo de la Confederación de Empresarios de Andalucía. Consideran que “la creación de este nuevo impuesto supondría generar una competencia fiscal entre territorios, dado que su implantación es una decisión de cada comunidad autónoma” y aseguran que tras la eliminación de la misma en Valencia se demuestra que “no tiene un retorno inmediato para el sector industrial turístico, dado que se incorpora al conjunto de ingresos de las administraciones sin destino finalista concreto”. Además de criticar que solamente recaiga sobre las pernoctaciones.


Lo que está claro es que se trata de un tema que está sobre la mesa, que el debate plenario de hace unos días iba muy bien orientado aunque se entienda que en Almería aún no es un problema.


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