Problemas de casa, desempleo y necesidad en menores: la Almería desfavorecida

Almería es una ciudad de contrastes y así lo demuestran lo diferentes que son cada uno de sus barrios. Lo son en historia y antigüedad de sus viviendas, en los servicios de los que disfrutan, en la población que viven en ellos, y gracias al diagnóstico realizado para la configuración del nuevo Plan de Servicios Sociales Comunitarios, el segundo que hace este ayuntamiento y que llegará hasta 2027, sabemos que también lo es en sus necesidades sociales.

Así, realiza este plan un análisis social de la situación en la que se encuentra la población a la que atiende cada uno de los cuatro Centros de Servicios Sociales Comunitarios (CSSC) en marcha en la ciudad. Es muy curioso que el centro que cuenta con un porcentaje de población desfavorecida más amplio no es precisamente ninguno de los que de primeras se señalaría. Se trata del  CSSC Centro-Rambla Belén. Aquí, trabajan los servicios sociales sobre una población de 44.000 almerienses siendo las zonas más desfavorecidas las de La Fuentecica-El Quemadero y Los Almendros-Piedras Redondas calculando que se encuentran en esa situación alrededor del 25% de la población. Un porcentaje altísimo de vecinos.

Según este informe, los principales problemas de los usuarios que atiende este centro en el que se incluyen además de las zonas ya nombradas las de Los Ángeles, Cruz de Caravaca, San Félix, Plaza de Toros y Pablo Iglesias, pasan por una población envejecida entre la que se ha incrementado la inmigración y en la que hay menores en riesgo de exclusión social y absentismo escolar, además, hay un alto porcentaje de precariedad laboral y problemas de acceso a la vivienda.

El segundo centro social que más volumen de población desfavorecida atiende es el CSSC Centro-Casco Antiguo. Según el diagnóstico realizado el 20% de la población de los barrios de La Chanca-Pescadería cuentan con una situación compleja. Aquí la situación muestra una alta tasa de ocupación de viviendas, deterioro de las infraestructuras, la presencia de casos de violencia de género y la existencia de adicción a las drogas así como un volumen importante de inmigración.

En el caso del Casco Histórico, en el que también actúa el centro, la problemática se centra en el gran envejecimiento de la población.

El Puche

El caso del centro social de Nueva Andalucía, en el que se atiende desde el Barrio Alto a Regiones, Nueva Andalucía, Torrecárdenas, San Luis, Avenida del Mediterráneo, Los Molinos y El Puche, una población de unos 51.000 habitantes, muchísimos, centra la parte más desfavorecida precisamente en El Puche donde un 12% de la población está en riesgo.

Aquí los problemas que se marcan son muchos y variados. Van desde una “deficiencia en las infraestructuras, suciedad” y hasta la “falta de cultura cívica entre los habitantes de la zona más desfavorecida”, a personas con dependencia, familias con menores con necesidades así como absentismo escolar y “situaciones de riesgo y/o maltrato infantil”. A esto hay que añadirle algo que se repite en casi todas las zonas desfavorecidas, problemas con la vivienda que aquí se centran en “situación de desahucio”.

El otro caso curioso se encuentra justo en el cuarto de los centros de servicios sociales que maneja el Ayuntamiento de Almería, el centro de Ciudad Jardín. En este CSSC se atienden a casi 65.300 almerienses, es el más grande de toda la ciudad, pero curiosamente “no existe una zona de especial vulnerabilidad” en los barrios que atiende. Hablamos de Ciudad Jardín, El Tagarete, 500 Viviendas, El Zapillo, Cortijo Grande, El Bobar, Vega de Acá, Nueva Almería, Los Cortijillos, La Cañada, La Juaida, Loma Cabrera, Venta Gaspar, Costacabana, El Alquián, San Vicente, Cuevas de los Medina, Cuevas de los Úbeda, Retamar, Ruescas, Pujaire, Cabo de Gata y Las Salinas.

Según el informe, en esta zona de la ciudad los principales problemas se encuentran en los barrios de Levante por su distancia del centro “y la ausencia de medios para desplazarse”, las personas en situación de dependencia, así como vecinos con riesgo de exclusión social.

De este análisis se deduce que existen cuatro zonas consideradas como desfavorecidas en la ciudad, en las que se trabaja desde los centros de servicios sociales y cuentan con problemas de precariedad laboral, vivienda y llegan a los menores en forma de absentismo escolar y necesidades no cubiertas principalmente.