Cuatro alumnas de Grado de Ciencias Ambientales de la Universidad de Almería están desarrollando desde hace unas semanas su proyecto 'Conservación del patrimonio ambiental de La Cañada de San Urbano: una perspectiva intergeneracional'. Bajo la metodología del aprendizaje de servicio, según la cual estas estudiantes deben realizar un servicio a la comunidad para poner en práctica sus conocimientos adquiridos en la asignatura de Economía de la Sostenibilidad, realizan actividades dirigidas al colectivo de la tercera edad de La Cañada sobre temática ambiental.
"El objetivo perseguido es múltiple: contribuir a la integración de colectivos vulnerables representados por las personas de la tercera edad y la concienciación ambiental a través del conocimiento sobre la riqueza e importancia de la biodiversidad del entorno de La Cañada", detalla Juan Francisco Velasco, profesor de María del Pilar Alcalá, Paula Mengíbar, Fátima Ezzahra y Paula Pérez, jóvenes que están viviendo una experiencia "gratificante" con más de una veintena de mayores de la Asociación El Puente con los que han creado un una hermosa conexión de aprendizaje mutuo.
Aprendizaje mutuo
Los ecosistemas de este barrio almeriense, los nombres científicos de sus especies de flora y fauna o cómo usar la aplicación 'Inaturalist', que ayuda a identificar las plantas y animales del entorno, son algunas de las cosas que las cuatro estudiantes de tercero están enseñando a estos mayores. Aunque el enriquecimiento, en lo que a adquirir conocimientos se refiere, es recíproco. "Ellos nos contaron cómo era La Cañada hace décadas o cómo llamaban de forma común a los pájaros. Aprendes a escuchar, la paciencia, las coges muchísimo cariño", asegura María del Pilar, alumna de 30 años de edad que siempre salía "muy feliz" de estos encuentros porque habían ayudado a personas "que suelen estar muy solas".
Este proyecto de formación en sostenibilidad y Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), amparado por el Vicerrectorado de Grados e Innovación Docente de la UAL, tiene como objetivo prioritario hacer accesible al colectivo de la tercera edad la concienciación ambiental, puesto que las campañas relacionadas con este tema suelen ir siempre dirigidas a los jóvenes. "Son personas vulnerables, aisladas, con problemas para usar las nuevas tecnologías y es necesario integrarles. Conforme avanza el proyecto se van detectando sus necesidades y en base a ello se va improvisando", comenta el docente del Área de Economía Aplicada de la UAL, que afirma además que "los mayores aportan muchísimo y las estudiantes toman notas de todo. Es un aprendizaje mutuo".
Sabiduría y mucho cariño
María del Pilar Alcalá, Paula Mengíbar, Fátima Ezzahra y Paula Pérez se están enriqueciendo de la sabiduría de los mayores, de los que han aprendido cómo era La Cañada hace medio siglo, sobre la figura de Antonio de Torres o cómo esta barriada fue perdiendo su playa frente a lo que actualmente es el campus de la UAL, entre otras muchas cosas. Pero también están nutriéndose de cariño. "En la primera charla nos cogían de la mano y en la segunda ya nos daban abrazos y dos besos. Es difícil explicar lo gratificante que es saber que estás ayudando a estas personas, que te dan cariño, atención, compañía... Y nosotras a ellos. Es una cosa diferente a lo que siempre he hecho, pero lo volvería a repetir mil veces. Estoy muy orgullosa", confiesa Alcalá.
Otra de las alumnas, Fátima, describe a La Voz de Almería que, al estar lejos de sus abuelos, que están en Marruecos, "sentí que eran mis abuelos". Asegura que "me sentí feliz cuando estaba junto a ellos y disfruté de sus conversaciones, aunque el tiempo era limitado". También notó "como si ellos necesitaran a alguien con quien hablar" y destaca que "nosotras nos hemos beneficiado de ellos en el sentido de que aprendimos información que no sabíamos y palabras que nunca habíamos escuchado".
Actividades del proyecto
Estos encuentros intergeneracionales han tenido lugar en el centro de la Asociación El Puente, en La Cañada, aunque en pocos días hay prevista una visita a la Universidad de Almería en la que estos mayores, acompañados por muchos más alumnos de Ciencias Ambientales, podrán fotografiar la fauna y la flora de los jardines del campus universitario. Además, el día de 8 de mayo tendrán una visita guiada al Pabellón de Historia Natural de la UAL.
Dijo la física Rosalyn Yalow, Premio Nobel en 1977, que la emoción del aprendizaje separa a la juventud de la vejez, que mientras estés aprendiendo, no eres viejo. Y estos 21 mayores 'cañaeros' muestran "muchas ganas de aprender cosas nuevas" a la vez que ofrecen su experiencia vital y sus recuerdos a un grupo de jóvenes estudiantes de la UAL con los que comparten tiempo y conocimiento por un bien común: que el importante tren de la concienciación ambiental no deje atrás a nadie.
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