Maribel Gutiérrez, recuerdos de una ‘Chica de la Bola Azul’

Si hay algo que caracteriza a las enfermeras de todo el mundo es su capacidad de entablar una relación única entre el profesional y el paciente construida sobre los cimientos de la empatía y el cariño que solo ellas saben ejercer desde la profesionalidad. Su naturaleza, tan cercana, y su vocación muestran el lado más humano de la sanidad, ya sea pública o privada, y son precisamente estos los valores que ha pretendido trasladar a sus alumnos y alumnas Maribel Gutiérrez. 

Esta almeriense se ha dedicado a formar futuros enfermeros y enfermeras durante 43 años, sin embargo, no solo fue la docencia que impartió la que le abrió el camino a cientos de profesionales a ejercer esta profesión, sino que también lo fue su valentía cuando en 1974 formó parte de la primera promoción de Ayudante Técnico Sanitario Femenino, cariñosamente conocida como 'Las Chicas de la Bola Azul', y de la que este año se cumple el 50 aniversario. 

"Éramos 15 chicas de 17 y 18 años que se estaban formando en la Escuela de la Seguridad Social de Almería, situada en el Hospital Virgen del Mar, más conocido como Bola Azul", cuenta Maribel Gutiérrez. Sus principios, como los de cualquiera, no fueron fáciles ya que, se trataba de 15 jovencitas que venían aplicando técnicas distintas, ni mejores ni peores que las de sus predecesoras, que trajo su directora Hermelinda del Hospital de Valdecilla. "No estaban acostumbrados a ver gente tan joven en los hospitales, y nos miraban con atención para ver qué hacíamos", recuerda la docente. 

Las Chicas de la Bola Azul tenían usaban su propio instrumental que esterilizaban ellas mismas junto a las gasas y jeringas, así como también se aseguraban de que las agujas metálicas estuvieran afiladas para dañar lo menos posible al paciente. No obstante, al avanzar la medicina de forma vertiginosa, cualquier novedad pronto quedaba obsoleta. "La técnica va avanzando conforme avanza la medicina, es decir, a la hora de pinchar, poner un catéter, una cura o drenar... Siempre hay gente investigando, evolucionando, y determinando cuál es la forma de trabajar. Se entiende como una carrera técnica, una carrera donde prima el ser humano y hacer las cosas bien para mejorar", expresa con extrema seguridad Maribel Gutiérrez. 

Al igual que ha evolucionado la medicina, también ha evolucionado el concepto de la enfermería. "Hace 50 años los estudios de Ayudantes Técnicos Sanitarios Femeninos no tenían tanto prestigio como ahora. No era una carrera, eran unos estudios para cuidar de los pacientes. Entonces, a ese ayudante técnico sanitario no se le daba mucha importancia", narra la chica de la Bola Azul. No obstante, la figura de la enfermera empezó a tomar peso cuando su formación pasó a ser una diplomatura. "Para estudiar enfermería había que entrar con nota, y pese a ser una profesión vocacional, a la carrera entraba gente con notas muy altas", precisa la enfermera. 

Desde entonces, se empezó a tener en cuenta lo importante que es tener a una enfermera en un equipo sanitario y por ende las líneas jerárquicas que relacionaban antaño al médico y a la enfermera comenzaron a desaparecer. "Ahora en un equipo se contempla tanto la labor como el rol de cada profesional, pues ambos son igual de importantes para sacar adelante la vida de un paciente", explica con orgullo Gutiérrez. 

Futuro prometedor

Por las manos de Maribel Gutiérrez han pasado la mayoría de los enfermeros y enfermeras almerienses, quienes además pueden presumir de ser de los profesionales más cotizados del ámbito sanitario. "Hasta que dejé de impartir clase en 2017 pude comprobar que las futuras generaciones vienen con la misma vocación que nos ha caracterizado desde siempre", asegura la profesora.