Salud descarta derivar a pacientes a un hospital de Lorca

El Hospital Virgen del Alcázar de la localidad murciana de Lorca se ha quedado fuera del concurso convocado por el Servicio Andaluz de Salud (SAS) para operar a pacientes de la sanidad pública y reducir las listas de espera en Torrecárdenas, Poniente y La Inmaculada. 

Al concurso para la contratación del servicio de asistencia sanitaria complementaria para procedimientos quirúrgicos a usuarios del SAS de la provincia de Almería, convocado hace unos meses mediante procedimiento negociado sin publicidad, se presentaron dos ofertas. Una de ellas fue la formada por la Unión Temporal de Empresas (UTE) de Sanitario Virgen del Mar y Hospital Mediterráneo (Vithas Virgen del Mar y HLA Mediterráneo ambos en la capital almeriense). Y la otra oferta fue la de Hospital Virgen del Alcázar de Lorca SA.

Mientras que la UTE almeriense optaba a todos los lotes del contrato del Servicio Andaluz de Salud, el hospital lorquino (invitado por el SAS a participar en el procedimiento) solo presentó oferta para seis lotes.

Más documentación

La Mesa de Contratación del Servicio Andaluz de Salud en Almería acordó el pasado mes de marzo requerir al hospital privado de Lorca más documentación.

Tras ese requerimiento, la Mesa de Contratación no se pudo reunir por la huelga de letrados de la administración sanitaria. Solventado el conflicto laboral, la Mesa volvió a reunirse el pasado 24 de abril.

Y el dictamen de la misma ha sido que la entidad lorquina “no ha cumplimentado” los apartados de idoneidad, solvencia económica y financiera, capacidad técnica y profesional y sistemas de aseguramiento de la calidad y normas de gestión ambiental.

Ante esa circunstancia, la oferta de Hospital Virgen de Alcázar “queda excluida”, dejándose vía libre para la futura adjudicación de todo el concurso a la UTE formada por Hospital Vithas Virgen del Mar y Hospital HLA Mediterráneo.

6.000 operaciones

Hay que recordar que el objetivo de la Consejería de Salud y Consumo es que antes de fin de año puedan ser operados en centros privados alrededor de 6.000 usuarios de la sanidad pública almeriense y así reducir el número de enfermos que esperan más tiempo del que se marca como máximo por la norma de la Junta de Andalucía.

Inicialmente, esa externalización de servicios mediante conciertos privados costará a las arcas de la Junta unos 17 millones de euros, pero podría incluso acercarse a los 40 millones si se prorroga el contrato más allá de finales de este año 2024.

La oposición en el Pleno del Parlamento de Andalucía ha criticado el plan de choque puesto en marcha por la Consejería de Salud y Consumo, que dirige Catalina García.