Las mujeres lideran los premios del concurso de robótica de la Universidad

Drones que crean hologramas, robots que realizan un trabajo cooperativo sobre el yacimiento y un pequeño camión que detecta metales bajo tierra. Son los prototipos ganadores del Desafío del Club de Robótica de la Universidad de Almería 2024, que tenía como objetivo el diseño de robots para uso arqueológico en lugares tan emblemáticos como Los Millares o Baria.

La final se ha celebrado este jueves en el Salón de Actos del Museo de Almería, con un remarcable final: los galardones han recaído en grupos conformados mayoritariamente por el género femenino. Las premiadas son Lucía Roldán, María Bernal y Daniela Soriano, del IES Ciudad de Almería, en la categoría de la ESO; y Carolina López, Alejandro Fernández, Miriam Pérez, y Siham Isarghine, del IES El Albián, en la categoría de Bachillerato. Un último galardón sorpresa ha premiado la creatividad del grupo conformado por Rocío Escobosa y Ainhoa Giménez, del IES Sierra de Gádor. 

La novedad de la convocatoria radica en que de los seis grupos finalistas, cuatro estaban conformados por alumnas. José Carlos Moreno, responsable del Club de Robótica de la UAL, señala este dato como un triunfo de la convocatoria: "Con esta iniciativa se intentaba fomentar las vocaciones STEM. Hay que tener en cuenta que casi todas las finalistas eran niñas. En cambio, en la universidad hay muchos ingenieros y muy pocas ingenieras. La idea es que las chicas también se vayan acercando a esto. Hay que motivarles para que estudien una ingeniería", ha subrayado. 

Los proyectos premiados

Lucía Roldán, portavoz del grupo ganador de la categoría de la ESO, señala que no se esperaban el resultado, pero que haber ganado las "motiva a seguir" por ese camino. Su proyecto, un pequeño robot-camión que localiza metales bajo tierra, ha sido el único que se ha desarrollado en formato físico, más allá de los planos.

La misma energía desprenden las chicas de bachillerato de El Albián, que querían "visibilizar los yacimientos" a través de hologramas creados por un dron y una serie de sensores: "Pensamos que las nuevas tecnologías serían una forma interesante de dar más visibilidad a los yacimientos". 

Ainhoa Giménez Peña, portavoz de su equipo, resalta lo "orgullosa" que está, aunque también reconoce la sorpresa al haber recibido el galardón: "Ni siquiera sabíamos que existía este premio, pero ha sido una experiencia muy bonita y estamos deseando repetir el año que viene", ha afirmado. Su proyecto, ganador del premio a la creatividad, estaba formado por un Kit Arqueológico: cuatro robots que trabajan en equipo para vigilar el yacimiento, guiar al visitante y encontrar diversos restos arqueológicos, tanto por aire como bajo tierra.

La exclusiva

A la convocatoria se inscribieron 45 equipos, aunque finalmente entregaron proyecto 34 grupos procedentes de seis centros educativos distintos. ¿La motivación? Una inscripción a la First Lego League, cuya temática se ha revelado en exclusiva durante el acto. Los participantes tendrán que diseñar máquinas que funcionen por debajo del mar para facilitar la tarea de los arqueólogos subacuáticos.

Dicha inscripción la han logrado los ganadores del concurso. De esta forma, "los chicos y chicas que hayan participado en el desafío de este año, irán encadenando con la liga de Lego y así seguirán en contacto con la ingeniería", explica Moreno. Los almerienses tendrán que esperar hasta febrero del año que viene para descubrir el desenlace.