21 cámaras, horarios y parking disuasorios: las otras claves del nuevo Paseo

Las dudas sobre la reconversión del Paseo de Almería a una zona de tráfico restringido han estado siempre vinculadas a los problemas o dificultades que para la movilidad podría generar el sacar a los coches de las arterias de la ciudad. De hecho, estas dudas son las que han llevado a toda la suerte de experimentos que desde la pandemia del COVID y bajo el amparo de la generación de recorridos saludables se han ido sucediendo en esta calle. Unos cambios que sí han conseguido uno de sus objetivos, reducir el volumen de vehículos que lo recorren cada día e ir acostumbrando a los usuarios a buscar rutas alternativas. Todos los almerienses lo hacen (lo hacemos) cada vez con mayor naturalidad.

Teniendo esto en cuenta, lo cierto es que cuando arranquen las obras y como si de un regalo de Reyes se tratara,los vehículos dejarán de circular libremente por esta vía de forma definitiva a pesar de que los trabajos se vayan a hacer por tramos. Se podrá cruzar el Paseo pero no recorrerlo en ningún caso. A partir de ahí son muchas las preguntas que se generan para los almerienses. La alcaldesa de la ciudad, María del Mar Vázquez, de momento tiene algunas respuestas pero otras están aún en fase de trabajo.

Lo primero que hay que saber es que, de momento, no está clara la ubicación que tendrán las paradas de taxi o autobús durante las obras, al igual que tampoco el sitio en el que se ubicarán los quioscos que recorren el Paseo. Sobre todo esto están aún trabajando. "Todavía lo estamos viendo. Los llevaremos a la mejor zona posible tanto a los taxis, los autobuses, los quioscos que tienen sus licencias, hasta a los autobuses escolares a los que también hay que darles una respuesta", afirmaba María del Mar Vázquez.

Tráfico futuro
Pero, después de las obras, ¿quién podrá circular por el Paseo? Explicaba la alcaldesa que podrá hacerlo el transporte público (autobuses y taxis), los servicios de emergencias, aquellos que se hospeden en un hotel de la zona, los residentes y el transporte de mercancías.

Para poder gestionar todo esto, el Ayuntamiento va a colocar a lo largo de la calle 21 cámaras de control de tráfico cuya principal misión es el reconocimiento de las matrículas de los vehículos que entran y salen de la misma con un régimen de sanciones para quien incumpla la norma que prohíba entrar en la calle. Un sistema que ya se utiliza en otras ciudades para el control de las zonas peatonales como por ejemplo Granada. 

Sabiendo esto, hay que desgranar cómo se va a gestionar cada uno de estos tráficos. Así, la carga y descarga tendrá que someterse a unos horarios que estarán marcados en la ordenanza que está elaborando el área de Seguridad y Movilidad. Cabe recordar que a esta misma normativa está esperando la app Almería Smart Mobility para prestar el servicio de reserva de espacios de carga y descarga.

En el caso del transporte público (taxis y autobús) aún no se han pronunciado sobre posibles paradas. Mientras para los que se hospeden en los hoteles lo normal es que las matrículas se faciliten con la reserva que se realice.

El grueso de la complejidad se encuentra en los residentes. ¿Cuántas matrículas se pueden dar por vivienda? Esa es, según Vázquez, una de las preguntas que les han trasladado los vecinos durante esos primeros encuentros para mostrarles el proyecto y claro, es algo sobre lo que aún no hay una respuesta. "Tenemos que ver cuántas matrículas habituales se pueden dar, cómo hacerlo para que puedan entrar sin ser multados en casos puntuales otros vehículos que no son los habituales... todo esto lo iremos trabajando para cerrarlo a lo largo del próximo año", explicaba la regidora almeriense.

Aparcamiento
Para evitar el tráfico por esta calle uno de los puntos principales es el poder contar con aparcamientos disuasorios que permitan a quienes acuden al centro dejar sus vehículos. Según la alcaldesa, el Ayuntamiento cuenta con un estudio de la oferta alrededor del Paseo de Almería que muestra que "hay plazas suficientes con los parking que hay para asumir el volumen de vehículos previsto".

A pesar de esto, explicaba Vázquez ese estudio de viabilidad que se ha encargado por parte del equipo de Gobierno municipal para realizar un aparcamiento subterráneo en la Plaza Juan Cassinello y entorno aprovechando el solar de Correos.