LA VOZ y la SER llenan de pasión y euforia por la Roja la Plaza de Toros

Euforia, ilusión y mucha magia. Almería no pudo celebrar más alto la victoria de España en la Plaza de Toros. 10.000 personas se reunieron en la histórica Plaza almeriense para ver la final de la Eurocopa 2024. El duelo, que enfrentaba a la Selección Española y a Inglaterra y que culminó con la victoria nacional, levantó a toda la Plaza de Toros con cada uno de los goles del equipo español. Los almerienses dieron rienda suelta a la euforia desatada por la victoria, que se prolongó varias horas después del pitido final por el resto de la capital.

Animación DJ y barras de comida y bebida amenizaron la espera desde las 19:00 horas para todos aquellos que ansiaban ver a España en la pantalla gigante instalada en la Plaza de Toros. El césped artificial en la pista y la habilitación de las gradas facilitaron la comodidad y la presencia de miles de almerienses en uno de los días más importantes en la historia reciente de la Selección. Las horas previas al partido se hicieron cortas para la mayoría de los asistentes gracias a la diversión y euforia desatada de la mano de los DJs Pickies Music en el enclave escogido para este gran día.

Familias, parejas o grupos de adolescentes acudieron más que preparados para un partido que ya apuntaba a estar repleto de nervios, tensión, pero también mucho apoyo y fuerza. Confeti, palos hinchables o balones rojos y amarillos, la Plaza estaba lista para enfrentar un partido para el recuerdo.

Pitido inicial y la tensión de la afición se podía palpar en el ambiente de la Plaza. No había ni un solo metro cuadrado que no estuviese tintado por camisetas, banderas y demás prendas de color rojo. Manos a la cabeza de los asistentes en cada una de las ocasiones falladas, muchos sustos y gritos ante las ocasiones de peligro del conjunto inglés, pero un ambiente de apoyo incondicional a la Selección que podía medirse por los constantes cánticos de la afición. 

Abrazos, saltos de alegría y demás muestras de euforia se vivieron en la Plaza en cada uno de los goles del conjunto español. Una pista desbordada de alegría e ilusión que alzaba sus banderas ante el orgullo de la inminente victoria de la Roja. En los momentos de menos actividad o, durante el propio descanso del partido, la mayoría de los asistentes optaban por refrigerarse o llenar el estómago en las barras ubicadas a los laterales de la Plaza. Mientras tanto, la afición no descansaba de corear cánticos y apoyo, toda Almería unida como muestra de apoyo.

Fin del partido, pero inicio de la alegría y el alivio. No hubo ningún asistente que no saltase y gritase de alegría ante la cuarta Eurocopa que cosecha la Selección. A pesar del pitido final, la fiesta no acababa en la Plaza, de hecho, comenzaba. La animación DJ, con Pickies Music, aportó la música perfecta para que la afición pudiese celebrar por todo lo alto una victoria más que esperada en cada rincón del país.

Un evento mágico

El evento, organizado por el Ayuntamiento de Almería, Siente la Plaza, La Voz de Almería, Los40 y Cadena Ser, reunió a 10.000 almerienses en la Plaza de Toros como muestra de apoyo a la Selección. Un día que, sin duda alguna, quedará para el recuerdo de todo aquel que decidió unirse a un evento único y mágico en la historia del fútbol español.

Gracias a esta iniciativa, 'Siente la final, siente la Plaza', la Plaza de Toros de Almería congregó felicidad, alegría e ilusión durante más de cuatro horas mágicas y para el recuerdo de una afición almeriense que no pudo estallar con más euforia. 

Más allá de la Plaza

La euforia desbordó los límites de la Plaza de Toros, la afición necesitaba prolongar la celebración. Miles de personas comenzaron a descender por la Rambla de Belén y el Paseo de Almería mientras se ondeaban banderas y sonaban cláxones de todos los vehículos de la ciudad. El nuevo punto de reunión acabaría por ser la Plaza de las Velas, iluminada de color rojo por la afición y las bengalas.

El último enclave, junto a la Plaza de Toros, en el que los almerienses celebrarían la que sería una noche histórica para España, y una noche histórica para Almería.