Una empresa almeriense advierte: “No hay que ser un genio para hackear un móvil”

Los niños no siempre son víctimas, en ocasiones los hackers más peligrosos han sido menores

La mejor forma de protegerse, es siendo consciente de la repercusión que tienen nuestros actos.
La mejor forma de protegerse, es siendo consciente de la repercusión que tienen nuestros actos. Pixabay
Karolina Lewandowska
09:42 • 24 sept. 2024

La digitalización del mundo es un hecho. Cada día nos movemos entre cientos de dispositivos electrónicos que nos facilitan la vida. Sin ir más lejos, un teléfono móvil nos permite tener todo una guía de páginas amarillas en nuestra mano, estar localizados vía GPS y tener todos nuestros datos en un mismo sitio. Y aunque tenerlo todo a un toque de nuestro dedo sobre la pantalla táctil nos resulta de lo más seguro y cómodo, realmente no lo es. “Cualquier dispositivo es ‘hackeable’ y no hay que ser un genio para corromper la seguridad de un móvil”, explica Francisco González, de BeSafe, una empresa almeriense especializada en ciberseguridad. 



Tanto ha incidido la tecnología en nuestra vida que no sólo los adultos hacen uso de ella, sino que incluso niños de muy corta edad saben manejarse perfectamente con cualquier dispositivo electrónico, sobre todo los móviles. Todo ello, a pesar de que a veces es considerado como muestra de la inteligencia del menor, en ocasiones puede poner suponer un grave riesgo. 



Red



“La red es muy amplia. Hay cientos de personas que buscan fisuras en la seguridad para llevar a cabo misiones poco lícitas”, explica el especialista almeriense. Para ilustrar estas actividades, Francisco González usó el ejemplo del popular juego, Fornite. 



“No estoy en contra de ese juego. Pero es cierto que se han dado casos en los que grupos con intenciones no muy buenas han tratado de ‘comerle la cabeza’ a los chavales para hacer uso de ellos cuando les convenga. ¿Y cómo lo hacen? Pues siendo sus amigos, regalándoles pases de Fornite... y todo esto lo hacen porque los chats de este juego son eliminatorios. Cada vez que acaba una partida no queda constancia de un registro escrito o de voz que permita identificar a las personas”, advierte González, que también es padre. 



Control



Sin levantar más alarma, el especialista en ciberseguridad afirma que prevenir este tipo de situaciones es mucho más fácil de lo que se piensa. “Establecer un control parental es fundamental. Tenemos que estar al tanto de lo que hacen nuestros hijos. Yo a los míos trato de inculcarles esa conciencia sobre la seguridad. De hecho, antes de agregar a un amigo nuevo en Fornite me preguntan si pueden, entonces yo me aseguro de que ese niño es de su entorno y hablo con los propios padres para que también concedan el permiso”, cuenta González. 



Sin embargo, el control parental no solo sirve para que los niños no se conviertan en víctimas, sino también para que no sean ellos los que ocasionen el daño. 


Bien sonado es el caso de Alcasec, un hacker que a sus 13 años ya había conseguido corromper la seguridad  de la Administración Publica. “El caso es que existen tutoriales en YouTube sobre como hackear, cursos, formaciones y prácticas que al final les hacen ver que es muy fácil acceder a la información por la que se paga mucho dinero en el mercado negro”, narra el experto. 


Foto inofensiva

El control sobre los más pequeños es fundamental, pero los mayores tampoco se deben descuidar. El especialista advierte de que lo que a nosotros nos puede parecer una foto inofensiva en las redes sociales, a los malhechores les hace frotarse las manos: “Si constantemente estamos dando cuenta de dónde estamos y lo que estamos haciendo ofrecemos una información valiosa a los ladrones. Tienen datos más que suficientes para desvalijarnos la casa con tranquilidad”. 


En este sentido, Francisco González asegura que la mejor forma de protegerse es siendo consciente de la repercusión que pueden tener en nuestra vida los actos que realizamos en la red. 


Por ello, la empresa BeSafe, además de ofrecer sus servicios a empresas, también hace charlas en colegios e institutos, tanto para alumnos y profesores como para padres y madres. “Mi intención es concienciarles de todo lo que pasa en la red, y no es cuestión de desconfiar de todo, pero hay que estar preparado”, concluye. 


Los pequeños, los más desprotegidos

González ha observado que las páginas de las administraciones como los ayuntamientos de pueblos más pequeños son más propensas a sufrir ataques debido a que su sistema de seguridad es insuficiente. 


Debido a la información existente, el especialista asegura que es necesario invertir en una buena seguridad. 



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