La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha solicitado de manera urgente a la Junta de Andalucía que modifique el actual reglamento que rige los medios técnicos de la Policía Local, permitiendo así la compra de pistolas eléctricas para los agentes de este cuerpo de seguridad. Según el sindicato, esta medida es crucial para mejorar la seguridad y autoprotección de los policías locales, quienes a menudo enfrentan situaciones de riesgo en el ejercicio de sus funciones.
El Sector de Administración Local de CSIF ha señalado la necesidad de actualizar el Decreto 93/2003, que regula la homogeneización de medios técnicos de la Policía Local en Andalucía, y que actualmente no contempla el uso de dispositivos electrónicos de control, como las pistolas eléctricas. Desde CSIF lamentan lo que describen como "desidia" por parte de la Administración andaluza, que ha ignorado reiteradas solicitudes del sindicato para modificar esta normativa. "Es indispensable que se permita a los ayuntamientos adquirir este tipo de equipamiento defensivo, que sin duda aumentaría la seguridad de nuestros policías locales", han enfatizado desde la organización sindical.
En respuesta a la negativa de la Junta de Andalucía, CSIF ha criticado que el gobierno autonómico se ampara en la nueva Ley 6/2023, de 7 de julio, que establece que será la normativa autonómica la que determine el tipo de armas reglamentarias para los cuerpos de seguridad. Sin embargo, el sindicato considera que esta ley, que entró en vigor el pasado mes de agosto, no soluciona de forma inmediata la problemática de la Policía Local. "La nueva legislación aún necesita un desarrollo normativo que podría tardar meses o incluso un año en entrar en vigor, lo que sigue dejando a los agentes desprotegidos", advierte CSIF.
Ante esta situación, el sindicato ha dirigido un llamamiento a la Consejería de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, instando a que se modifique de manera urgente el decreto vigente. "No podemos permitir que los policías locales sigan indefensos, especialmente cuando por proporcionalidad no pueden utilizar sus armas de fuego", han señalado, destacando la necesidad de que los agentes cuenten con alternativas de defensa adecuadas para situaciones que no justifiquen el uso letal de sus armas.
El conflicto también involucra a la intervención de armas de la Guardia Civil, que prohíbe actualmente a las entidades locales la compra de pistolas eléctricas para sus policías, al considerar que la normativa andaluza las clasifica como "prohibidas". Para CSIF, esta interpretación es "sesgada", ya que argumentan que la Orden de 15 de abril de 2009, que regula los medios técnicos de la Policía Local, establece que los ayuntamientos pueden añadir elementos complementarios de autoprotección a sus agentes, siempre que estos reciban el entrenamiento adecuado para su uso.
El sindicato ha subrayado que, en la práctica, "la Policía Local se enfrenta a diario a situaciones peligrosas, muchas veces en condiciones más adversas que otros cuerpos de seguridad, como la Guardia Civil o la Policía Nacional", especialmente en aquellos municipios andaluces donde los recursos son limitados y la presencia de otros cuerpos es escasa. “No entendemos por qué la Guardia Civil se niega a permitir el uso de pistolas eléctricas por parte de la Policía Local, cuando sus propios agentes las están solicitando debido al aumento de la inseguridad en las calles”, ha resaltado CSIF.
En este contexto, CSIF ha solicitado al Gobierno andaluz que "ponga remedio a esta situación" y permita que los ayuntamientos puedan adquirir estas armas no letales, mientras se avanza en el desarrollo de la nueva normativa.
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