“Los alimentos deben demostrar que no son nocivos antes de salir al mercado”

Gloria López-Gálvez es veterinaria, colegiada por el Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Almería, y doctora en la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria en Parma (EFSA por sus siglas en inglés). Además, recientemente, ha sido galardonada con el ‘Manfred Kroger Award 2024’ en reconocimiento a su trabajo como revisora de publicaciones científicas. Esta semana recibe al COLVET Almería para hablar de su trabajo a diario y de las preocupaciones que conciernen a la seguridad alimentaria en la actualidad.

¿Qué la motivó a convertirse en veterinaria y a especializarse en seguridad alimentaria?

Me interesaba mucho la tecnología alimentaria y, en 1983, la única carrera universitaria que contenía esa especialidad era Veterinaria.

¿Cómo describiría su trayectoria profesional hasta llegar a la EFSA?

La describiría como variada y enriquecedora con experiencia en investigación, en la empresa privada, en la Universidad, y tanto dentro como fuera de España. Así, en mi currículum cuento con contratos en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en la Universidad de California Davis de los Estados Unidos de América, en dos empresas hortofrutícolas, en el Joint Research Center de la Comisión Europea y finalmente en la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria.

¿Cuál es su papel en la EFSA?

Desde el año 2021 tengo un puesto en la Agencia, como Coordinadora de la Estrategia de sostenibilidad para los productos químicos y la implementación de ‘Una substancia, una evaluación’.

¿Qué aspectos de su trabajo encuentra más gratificantes y cuáles más desafiantes?

Uno de los aspectos más gratificantes del trabajo en EFSA viene al final del proceso. Quiero decir: cuando hay una decisión de la Comisión Europea y los Estados miembros para autorizar (o no) un producto de los que EFSA ha realizado la evaluación de riesgos. También es muy gratificante el poder trabajar en un ambiente con compañeros de muchos países europeos; se aprende mucho de todos. Uno de los aspectos más desafiantes yo diría que es la comunicación de nuestras evaluaciones científicas. Es difícil traducir la terminología científica a un lenguaje plano que pueda ser entendido por el ciudadano europeo medio.

¿Cuál es la función principal de la EFSA a nivel europeo?

La EFSA es la autoridad europea de seguridad alimentaria creada en 2002 tras varias crisis alimentarias, y proporciona la base científica para leyes y reglamentos que protegen a los consumidores europeos de los riesgos alimentarios, desde la granja hasta la mesa.

Nuestras actividades principales incluyen: recopilar, evaluar e integrar pruebas científicas sobre riesgos de la cadena alimentaria (incluyendo alimentos y piensos); proporcionar asesoramiento científico independiente a gestores de riesgos y responsables políticos de la Unión Europea (UE); ofrecer comunicación de riesgos independiente y oportuna; y promover la cooperación científica.

¿Cómo garantiza la EFSA que los alimentos que consumimos sean seguros para la salud humana y animal?

Llevamos a cabo evaluaciones de riesgos exhaustivas que tienen en cuenta la salud humana, animal y medioambiental de acuerdo con el enfoque «Una Sola Salud». Colaboramos con socios y partes interesadas de todo el mundo para garantizar la seguridad alimentaria en la UE. La EFSA también colabora estrechamente con las organizaciones de evaluación de riesgos de los Estados miembros y otras agencias de salud pública europeas.

¿Qué papel juega la resistencia a los antimicrobianos en la seguridad alimentaria y cómo lo aborda la EFSA?

La EFSA apoya a los gestores de riesgos con asesoramiento científico sobre la resistencia a los antimicrobianos (RAM) en la cadena alimentaria y en los animales. En colaboración con agencias de la UE como la Agencia Europea para la prevención y control de enfermedades (ECDC, en sus siglas en inglés) y la Agencia Europea del medicamento (EMA, en sus siglas en inglés), la EFSA integra las evaluaciones de riesgos para las personas, los animales y el medio ambiente.

Las asociaciones de la EFSA a nivel de la UE e internacional son vitales, ya que a pesar de la reducción del uso de antibióticos, la resistencia bacteriana sigue siendo un problema grave que requiere intervenciones reforzadas y un uso prudente de los antimicrobianos. Entre los proyectos en curso figura la evaluación de la difusión de la resistencia a los antimicrobianos (RAM) durante el transporte de animales, solicitada por el Parlamento Europeo. A medida que aumenten los conocimientos, los dirigentes de la UE podrán hacer frente mejor a la RAM.

¿Cómo aborda la EFSA los desafíos relacionados con la producción de alimentos de origen animal?

La salud de los animales es crucial para la seguridad de los alimentos. La mejora de la sanidad animal aumenta la calidad de los alimentos e impulsa la sostenibilidad de la producción de alimentos de origen animal.

Es bien sabido que la salud animal está vinculada a la salud humana, ya que algunos patógenos pueden infectar a ambas. El enfoque «Una sola salud» es vital para prevenir y controlar las enfermedades en animales y humanos. Proteger la salud animal salvaguarda la salud pública, la seguridad alimentaria, las economías rurales y el medio ambiente.

¿Cómo afecta el cambio climático a la seguridad alimentaria?

Ya está afectando. El aumento de las temperaturas y las condiciones cambiantes pueden provocar el desplazamiento de especies invasoras perjudiciales para la salud de plantas y animales. Esto es solo uno entre los muchos ejemplos concretos de impactos posibles. Hacer frente a estos impactos requiere un complejo trabajo científico. Un elemento clave para afrontar este reto es una mayor cooperación entre científicos de distintas disciplinas.

¿Qué recomendaciones haría a los consumidores para tomar decisiones informadas sobre los alimentos que consumen?

Todos sabemos que los ingredientes de los alimentos influyen mucho en su sabor y, hasta cierto punto, también en su precio. La mayoría de la población se preocupa por la composición de los alimentos que consume, pero, en Europa, todos los ingredientes alimentarios deben demostrar su inocuidad antes de ser autorizados y puestos en el mercado.