La crisis provoca una oleada de solidaridad en Almería

Las ONGs confirman el aumento de jóvenes de entre 21 y 30 años en las acciones en 2013

Voluntarios en la recogida de alimentosx,auto,a
Voluntarios en la recogida de alimentosx,auto,a
Marta Rubí
01:00 • 04 ene. 2014

Muchos son los mitos que circulan entorno al número 13 pero lejos de ser una simple cifra asociada a los malos presagios, el 2013 será recordado por el Año Internacional del Voluntariado y por ser el año del “compromiso”. 365 días, 525 600 minutos que han servido para poner en valor el quehacer de miles de jóvenes.
Las cifras así lo demuestran, según los últimos datos obtenidos por Cruz Roja, en agosto de este mismo año, España había superado los doscientos mil voluntarios. De ellos el 28,48% tenían edades comprendidas entre los 21 y 30 años.
Y la implicación llega a todos los rincones de la provincia. Según Guadalupe Reyes Martínez, responsable de Mayores y Captación de Cruz Roja Roquetas de Mar, en el 2013 los datos han sido alentadores.El número de voluntarios jóvenes que colaboraron ha ascendido hasta alcanzar los ochenta. Aunque como toda ayuda es poca, insta a todos a participar.
Reyes Martínez añade que “se ha producido un aumento de voluntarios jóvenes en el proyecto de mayores, donde se sienten a gusto trabajando. Casi un sesenta por ciento de los voluntarios son jóvenes.”




Cabe diferenciar los voluntarios que apoyan la diversificada labor de la organización durante todo el año, de aquellos denominados como usuarios. Se trata de voluntarios ocasionales que surgen en acciones puntuales como la venta de lotería, carreras solidarias o recogida de juguetes y alimentos.
Los hay incluso de menor edad. Raúl Genaro Navarrete, de 16 años, formó parte del último mercadillo solidario Ayúdanos a ayudar que Posidonia celebró en Aguadulce. Tras el stand otros cuatro voluntarios de edades similares. Genaro explica orgulloso que lleva tres años colaborando de manera intermitente con la asociación. Para él ser voluntario significa formar parte de una gran familia.
Otro joven, José María Azorín, voluntario del Banco de Alimentos de Almería, matiza que lo realmente importante es querer ayudar y entender que esa ayuda engloba diferentes ámbitos. “Existen muchos campos, muchas vías, muchas personas que necesitan tener un punto de apoyo”, explica.










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