21:00 horas de un día cualquiera. Comisaría de la calle Alcalde Muñoz, en Almería capital. Más de 20 agentes impecablemente uniformados se reúnen en una pequeña sala presidida por un mapa del término municipal de Almería y un panel repleto de armas.
Dos mandos informan del operativo de esa noche y reparten órdenes. En breve, se desplegarán por puntos previamente definidos de la ciudad, pararán vehículos, vigilarán zonas, identificarán personas, intervendrán si es necesario... buscarán, en definitiva, disuadir con su presencia y movimientos a delincuentes en busca de objetivos y transmitir sensación de control y seguridad. Sus objetivos preferentes: zonas poco pobladas y poco vigiladas del diseminado rural de Almería. Son los Cobra, el grupo operativo del Cuerpo Nacional de Policía especializado en la noche.
Cinco años
Los Cobra acaban de cumplir cinco años. “Es un grupo creado específicamente para la noche e integrado en la Brigada de Seguridad Ciudadana. Tiene como misión paliar o disminuir los delitos que más inseguridad o alarma social crean, contra la propiedad, violencia o las sirlas, robo con intimidación; que suelen darse por las noches”, indica el inspector jefe, Ulises Moreno. Además de los objetivos propios del subgrupo, los agentes Cobra pueden ser el apoyo del patrullero Zeta en el momento que lo necesiten.
Su atención se dirige de manera prioritaria hacia el que policialmente catalogan como Sector 4, el entorno agrícola de la capital. El 80% del terreno del municipio de Almería lo es. “En esa extensa zona hay importantes intereses económicos que hay que proteger, evitando que sean vulnerables y objeto de robo”, expresa el jefe de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Almería, Manuel Marín.
El objetivo
El ‘briefing’ pervio al reparto de objetivos de cada día se estructura en base “a los informes recabados durante el día, de otras unidades, robos, denuncias de robos, participación ciudadana, asociaciones de vecinos y asociaciones de agricultores, con las que mantenemos muchos contactos porque tenemos muchas incidencias en este sector, que es el de los invernaderos. Toda esa información que recabamos durante el día la estudiamos, perfilamos y por la noche salimos con unas misiones programadas”, indica el subinspector Hugo García.
Analizados los datos, llega el momento de la acción. Pertrechados con chalecos antibalas, chalecos reflectantes, conos, material para controles, y a lomos de todoterrenos, furgonetas y motos de trail -la orografía del terreno así lo requiere- los agentes se dirigen a sus objetivos. “Siempre trabajamos donde el pico delicuencial se alza un poco”, precisa el subinspector, Hugo García. En este caso, los informes aconsejan un primer control en la barriada periférica de Retamar. La noche será larga para los Cobra.
LA VOZ con los COBRA En esta ocasión, la información que los propios agricultores han facilitado, ha propiciado que por parte de la “Jefatura de la Comisaría Provincial se efectuaran los planes estratégicos para esta zona del sector 4 y que están dando muy buenos resultados”, indica Hugo García. Mientras, los agentes continúan con el despliege del control que han montado en un punto estratégica de Retamar.
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