Jesús Martín no salía de su asombro cuando le llegó una factura de Aqualia, por el consumo de agua en su vivienda, de 1.301 euros. Según aseguró a La Voz de Almería “de momento acudí a las oficinas de Aqualia donde me dijeron que arreglara inmediatamente la avería que tenía, y respecto a la factura me dijeron que tenía que pagarla en su totalidad ya que la avería era responsabilidad mía”.
Apuntó que “en menos de una semana estaba detectada y arreglada la avería” por lo que acudió de nuevo a Aqualia para reclamar “lo que yo consideraba una injusticia, un atropello”, sin embargo, desde la concesionaria del servicio de agua de la capital “solo se me indicó que si no pagaba la factura me cortaban el agua, que como mucho podían fraccionar el pago de la misma”.
Otra factura peor
Tras pensar que la avería detectada en una de las tuberías bajo el terreno de su vivienda en Retamar había sido reparada ya y por tanto que “la pesadilla” había terminado, la siguiente factura ascendió a 2.864,88 euros, por lo que “volví otra vez a Aqualia a ver qué pasaba y lo único que me dijeron es que la avería se produjo entre el final del 3º trimestre y principios del 4º trimestre, e igualmente que debía abonar la misma, porque si no pagaba me cortaban el agua”.
Jesús Martín quiere denunciar su caso y afirma que según el Reglamento de Suministro de Agua Andaluz, Decreto 120/1991, se establece que en caso de avería el usuario debe abonar el consumo de agua (art. 10), sin embargo, el proveedor de agua, en este caso Aqualia, en caso de avería solo abona en concepto de indemnización si la misma dura más de 9 días (art. 8), es decir, “el consumidor siempre responde por averías, pero no así Aqualia”.
Reconoce que “es cierto que los usuarios somos responsables del mantenimiento de nuestras instalaciones, pero a nadie se le ocurre revisar las tuberías cada mes para comprobar que no hay fugas y máxime cuando son tuberías que van bajo tierra”.
Un atropello
Otro de los puntos que denuncia Jesús Martín es que en el término municipal de Almería “no se tiene en cuenta si ese desfase en las factura se debe a una avería o a un consumo indebido” y reconoce que se abona el agua por tramos de consumo, estando el tercer y cuarto tramo dirigidos a los consumidores que por un uso indebido, consumen agua potable destinándola a otro uso, como llenado de piscinas o regadíos “sin embargo, mi caso no es ese, ya que yo no he hecho un consumo indebido del agua potable, sino que una avería ha provocado que el agua se desperdiciase, no debiendo hacerme responsable de esa penalización”.
Además la tasa de alcantarillado variable ,que se fija de manera proporcional al consumo, es de más de 1.300 euros “también desproporcionado porque en ningún caso el agua se vertió por el alcantarillado ya que se filtró en el terreno porque la fuga se produjo bajo tierra”.
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