La tragedia de la inmigración clandestina, de las mafias y del hambre llaman de nuevo a las puertas de la provincia de Almería. Guardia Civil y Salvamento Marítimo buscan los cuerpos de una treintena de ciudadanos subsaharianos naufragados durante el viaje de una patera desde Marruecos hasta la costa levantina. En la embarcación navegaban 57 personas y sólo 28 tocaron tierra.
Las cifras, basadas en el testimonio de los rescatados y todavía provisionales, muestran la enorme dimensión de la tragedia. Entre los desaparecidos hay, según datos de los cooperantes, ocho bebés y una veintena de adultos.
Salvamento Marítimo buscaba la embarcación desde la mañana del jueves tras recibir una alerta de familiares alarmados por la ausencia de noticias. El bote partió la tarde del miércoles desde Marruecos y permanecía desaparecido unas 48 horas.
Supervivientes
Los recursos de Salvamento se movilizaron de inmediato la mañana del jueves, desde la Águilas hasta la provincia de Granada. Una franja marina demasiado amplia. Cientos de kilómetros de incertidumbre. Cuando un mercante avistó la patera a primera hora de la mañana del viernes, la mitad de los viajeros se había perdido ya en la profundidad del Mar de Alborán.
Según informó la institución dependiente del Ministerio de Fomento, la Salvamar Denébola auxilió a los ocupantes de la embarcación a 18 millas al sureste de Cabo de Gata. A bordo permanecían 28 subsaharianos. Una vez asegurados en la cubierta, el helicóptero Helimer 211 izó a una mujer embarazada y a un bebé hasta la aeronave y los llevó hasta Torrecárdenas, donde están ingresados en la UCI en estado grave.
Mientras, el resto de los inmigrantes fue trasladado hasta el Puerto de Almería. La Salvamar atracó en el muelle a las 13 horas aproximadamente y voluntarios de la Cruz Roja Española prestaron los primeros auxilios. Ahora permanecen en los módulos de custodia temporal. A lo largo de la tarde cinco mujeres embarazadas fueron trasladadas también al hospital por precaución.
Al cierre de la edición, continuaba la búsqueda de los desaparecidos con el buque de altura Sar Mastelero y el Helimer 211, además de recursos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.
Los datos oficiales adelantados por la delegada del Gobierno en Andalucía, la almeriense Carmen Crespo, apuntan al rescate de 28 personas y el naufragio de otras 23. Los agentes tomarán testimonio a los supervivientes para confirmar las cifras de la catástrofe. Y no es la primera.
Sin gasolina a 18 millas de la costa
La Salvamar Denébola rescató la embarcación a unas 18 millas al sureste de Cabo de Gata al filo de las 10 horas del viernes. Según el testimonio de los supervivientes, el bote estaba en el mar desde dos días antes y quedó a la deriva tras agotarse el combustible. Desde la mañana del jueves se peinaba toda el litoral en una persecución desesperada de los inmigrantes. No ha trascendido si cayeron al mar tras zozobrar el bote o sufrieron efectos de la deshidratación.
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